El entrenador del Espanyol, Quique Sánchez Flores, ha explicado que, contra el Valencia, su equipo debe "tratar convenientemente la atmósfera de Mestalla y ser fuerte", debido al momento convulso que vive el rival y, también, a su calidad como equipo.
El técnico ha mantenido este sábado que el vestuario está preparado "para un partido difícil y muy complicado", aunque ha recordado que "no es la primera vez" que van a un campo con dificultad.
"Será un encuentro complejo y debemos leerlo lo mejor posible. Tiene una gran plantilla, aunque por lo que sea no está en su mejor momento", ha agregado.
Cuestionado por las ausencias de Piatti, Víctor Sánchez y Baptistao, el primer por contrato y el resto por lesión, el responsable del banquillo catalán ha evitado alarmismos: "Imagino una alineación buena y competitiva. El once no está confeccionado aun, pero no hay preocupación, sino ganas".
Sánchez Flores ha valorado el regreso a la convocatoria del portero Diego López, recuperado de sus molestias. "Si juega o no es una decisión que no está tomada", ha dicho.
Respeto a Baptistao, Quique ha mantenido que el regreso del brasileño "aún llevará tiempo, aunque parece que estamos en la solución definitiva".
A nivel personal, el preparador del conjunto españolista ha recordado con cariño su pasado en el Valencia: "Todo lo que he sido y fui está moldeado en Valencia. Estaré eternamente agradecido a su afición. Siempre he deseado que sean lo más felices posible, pero ahora no tengo información para opinar de lo que está pasando en el club".
El preparador del Espanyol ha alabado a la figura de Voro, su homólogo en el Valencia. "Es mi colega, mi compañero y mi amigo por encima de todo. Es un tipo maravilloso y le deseo lo mejor", ha aseverado.
Quique ha mantenido, finalmente, que el club no tiene "demasiado ímpetu" por fichar en este mercado de invierno. "Para que haya movimiento debe producirse de forma externa. Si un jugador sale la entidad hará un movimiento", ha comentado.