El entrenador del Espanyol, Quique Sánchez Flores, ha asegurado después de la derrota contra el Girona en el RCDE Stadium que "claro que" se ve "con fuerzas para seguir" y que "como entrenador no" piensa en lo que va "a durar o no, o si el Consejo confía en" él "o no".El técnico, por otra parte, ha desvelado que pudo haber dejado la entidad este verano. "Entonces tuve tiempo de tomar mis decisiones y decidí quedarme. Toca demostrar que uno puede virar el rumbo", ha dicho. "No quiere que la afición piense que tenía un buen entrenador el año pasado y ahora ya no, el trabajo es el mismo", ha agregado.
Quique Sánchez Flores ha reconocido que en el vestuario existe "un sentimiento de frustración importante". "Hemos jugado con la limitación de hacerlo con nervios y prisas, algo que nos aleja de nuestro fútbol. La situación contra el Girona se ha ido complicando", ha analizado el madrileño.
El responsable del banquillo ha apuntado que el tanto de Timor en el minuto 45 "le ha dado vida al rival".
"Y nosotros no hemos tenido la tranquilidad y la frialdad para resolver el encuentro", añadió.
El técnico ha destacado el mérito del conjunto de Machín, pese a que sus jugadores, ha dicho, "han ido al límite".
Quique ha apostado por silenciar las alarmas tras la situación del equipo. "Estamos en una fase que me empieza a recordar al inicio de la temporada pasada. Pero debemos templar ánimos y evitar dramatismos en un momento complejo y delicado", ha aseverado el preparador blanquiazul.