Duelo de crisis, en busca de la identidad perdida

Las Palmas y Espanyol, dos conjuntos con sus identidades de juego perdidas, se enfrentarán este domingo inmersos ambos en una crisis que ha devuelto a los canarios al último puesto de la clasificación, mientras los catalanes viven también un momento delicado.

El equipo isleño despedirá en casa un 2017 nefasto no solo en cuanto a resultados obtenidos, sino también en la toma de decisiones por parte del club.
De hecho, Paquito Ortiz, el tercer entrenador de esta temporada, volverá a sentarse en el banquillo por tercera vez de forma interina, sin la titulación requerida, después de que esta semana se confirmase que al argentino Jorge Almirón, con el que Las Palmas había cerrado un acuerdo, no se le permite entrenar en España, un episodio más del esperpento que vive la entidad.
Mientras tanto, el cordobés de origen grancanario Paco Jémez, continúa retransmitiendo su inminente llegada al banquillo de la Unión Deportiva en diferentes emisoras de radio, adelantando incluso un posible número de altas y bajas en el mercado de enero, aunque la entidad no termina de confirmar lo que ya es un secreto a voces.
En mitad del desbarajuste, el equipo amarillo se juega tres puntos de vital importancia para intentar salir al menos del último puesto -no podrá hacerlo de la zona de descenso- y recuperar la personalidad que se ha dejado en el camino.
Después de un atisbo de recuperación, con empate a domicilio ante la Real Sociedad (2-2) y triunfo ante el Betis (1-0), el equipo isleño volvió a las andadas en la anterior jornada con derrota ante el Deportivo Alavés (2-0), frente al que volvió a evidenciar una preocupante falta de agresividad, tratándose además de un rival directo por la permanencia.
Para este domingo, en una tesitura similar, ante otro adversario en apuros al que podría acercarse a solo tres puntos en caso de victoria, al menos Paquito Ortiz puede contar con casi toda la plantilla, con las únicas bajas de Víctor Machín 'Vitolo' y Alen Halilovic, lesionados de larga duración.
A su vez, el Espanyol atraviesa uno de sus peores momentos del curso tras haber perdido cuatro de sus últimos cinco partidos de liga, y haber provocado los silbidos de su grada, y está obligado a reaccionar este domingo con un triunfo contra Las Palmas.
El vestuario blanquiazul no ha encendido las alarmas pese a los malos resultados. Todos los futbolistas están convencidos de que sacarán adelante la situación. Nadie en el club, incluido el presidente Chen Yansheng, de visita institucional, se plantea decisiones drásticas, como destituciones. Quieren tranquilidad.
De todos modos, el choque frente al último equipo de Primera es vital para recuperar la confianza y las buenas sensaciones. Un traspiés en Gran Canaria no ayudaría a calmar los nervios. Acabar el año con optimismo es la meta del grupo: mañana Las Palmas y, en la siguiente jornada, frente al Atlético de Madrid.
Son novedad en la convocatoria el delantero Sergio García, el lateral derecho Javi López, recuperados de sus respectiva lesiones, el centrocampista Melendo y el central brasileño Naldo. Caen el mediocentro Fuego, el defensa Marc Navarro, el extremo paraguayo Hernán Pérez y el lateral izquierdo Dídac Vilà.
El central David López podrá jugar con máscara protectora a medida, de fibra de carbono, tras sufrir una fractura nasal durante el partido contra el Girona.

 
Árbitro: Sánchez Martínez (Comité Murciano).
Estadio: Gran Canaria.
Horario: 17.30 (local).
Puestos: Las Palmas (20º, 10 puntos); Espanyol (16º, 16 puntos).
La clave: El equipo que sea capaz de manejar los nervios, olvidar la clasificación y acercarse a su nivel de juego, tendrá mucho ganado.
El dato: Se enfrentan los menos realizadores de Primera (11 goles), y el Espanyol es el peor visitante junto al Málaga, con tres empates, sin conocer el triunfo fuera de casa.
La frase: Paquito Ortiz, entrenador interino de la UD Las Palmas: "Las noticias salpican al equipo, pero quiero que mis jugadores estén concentrados en el presente".
El entorno: Último partido del año en casa para el equipo grancanario, que cierra ante sus aficionados un 2017 para olvidar.