El RCD Espanyol afrontará el partido ante el RCD Mallorca de la octava jornada con mejores ánimos tras conseguir una importante victoria en la Europa League ante el CSKA de Moscú. David Gallego logró solventar un compromiso que, de haberse resuelto con una derrota, habrían podido significar su despido.
Durante el duelo en la capital rusa, el cuadro perico sufrió, tras apenas 20 minutos de juego, la lesión de Jonathan Calleri, que componía el ataque blanquiazul junto a Matías Vargas y Wu Lei.
Su salida del terreno de juego propició la entrada en el mismo del joven Víctor Campuzano. El canterano perico devolvió la confianza a su entrenador y participó en el primer tanto de la tarde antes de culminar su partido con el gol que cerraba el partido.
Además, Campuzano disfrutó de varias oportunidades para batir a Igor Akinfeev, pero el guardameta ruso logró evitar que consiguiera anotar.
La irrupción del ariete de 22 años es una sorpresa agradable para David Gallego, que cuenta para el duelo en Son Moix con las bajas de Jonathan Calleri y de Facundo Ferreyra.
El primero de ellos tuvo que ser sustituido en Moscú y el club perico no ha emitido comunicado médico, por lo que su reaparición no está descartada.
Ferreyra cayó lesionado en el partido ante el Éibar el pasado 15 de septiembre y sigue recuperándose de su lesión. Se espera que vuelva a finales de octubre.
Wu Lei, que además se reencontró con el gol, queda como el único delantero disponible más allá de Campuzano, con ficha del filial.
No obstante, David Gallego está optando últimamente por acostar a Wu Lei y Vargas a las bandas dejando la punta del ataque a otro futbolista que, en esta ocasión podría ser Víctor Campuzano.
El canterano está ante una gran oportunidad para irrumpir en el once. Pese a ello, tampoco hay que descartar que Wu Lei ocupe la punta del ataque y su puesto sea cubierto por Pedrosa, dando entrada a Dídac en el lateral izquierdo. Habrá que esperar.