El Espanyol sucumbe en Montilivi: el resumen

El RCD Espanyol tuvo un sinfín de ocasiones claras para ganar este sábado en Montilivi, pero los tres puntos del derbi catalán fueron de nuevo para el Girona FC, que se impuso con un gol de Pablo Moreno en la primera mitad.

Los blanquiazules se mantienen líderes a pesar de la derrota, la cuarta de la temporada en la Liga, y la segunda ante el Girona, mientras que el cuadro rojiblanco rompió una racha de cuatro partidos ligueros sin conocer la victoria con un triunfo de enorme prestigio que le permite soñar.

El Espanyol fue el indiscutible dominador de la posesión en el primer acto, pero fue incapaz de trasladar su superioridad sobre el verde al electrónico, aunque tuvo ocasiones de sobra para romper la igualada.

El 0-1 parecía una inevitable cuestión de tiempo, pero los visitantes desaprovecharon hasta cinco ocasiones de gol en los primeros 45 minutos. La más clara la tuvo David López a la salida de un córner, pero su cabezazo desde la frontal del área pequeña lo repelió Juan Carlos, providencial y omnipresente.

El arquero madrileño, el sostén del Girona en la primera mitad, también neutralizó un duro chut de Nico Melamed y el Espanyol también pudo adelantarse con un disparo de Embarba desde el balcón del área que se estrelló en el palo derecho de Juan Carlos, con un tiro muy lejano de Raúl de Tomás, con un remate desviado de Puado o con un disparo de Cabrera rechazado por la defensa local.

Pero lo que llegó fue el 1-0. El Girona apenas había inquietado a Diego López con un disparo de Samu Sáiz que la zaga envió a saque de esquina, pero justo antes del entreacto, en el minuto 41, halló el gol gracias a la perseverancia y al olfato de Pablo Moreno.

El joven atacante, cedido por el Manchester City, recogió un rechace en el área y, solo ante el meta visitante, definió con maestría, celebrando su segunda diana en el campeonato liguero.

Convencido de que solo un milagro le impidió marcar en el primer tiempo, el Espanyol redobló su ofensiva al salir de los vestuarios y solo necesitó cinco minutos para volver a acariciar el gol.

Tuvo una gran ocasión Raúl de Tomas, tras una mala salida de Juan Carlos, pero Jordi Calavera salvó al equipo gerundense al repeler el potente disparo desde fuera del área del '11' sobre la misma línea de gol.

Tan solo unos minutos después, el palo izquierdo de Juan Carlos repelió un remate franco de cabeza de Puado. Más franco aún fue, en el 67, un cabezazo de Keidi Bare que Juan Carlos, el héroe de la tarde, contrarrestó con una brutal parada de portero de balonmano.

El Girona, por su parte, apenas se acercó al arco de Diego López con un chut de falta de Sylla desde la frontal, pero el conjunto de Francisco, no sin sufrir, supo aguantar el 1-0 y conquistó un triunfo de un valor incalculable para seguir avivando el sueño del ascenso.