"Si es así, si se produce (la destitución), perderé un trabajo y el Betis intentará salir de esta racha. Y si es así, los jugadores necesitan calma, serenidad, que les apoyen; el equipo ha sumado un punto de 27, soy entrenador de fútbol y sé cómo va esto, y a lo mejor esa es la receta, esperemos que si la receta es esa dé resultado y el equipo salga adelante y salve la categoría", ha añadido.
Asumiendo la realidad actual del equipo, el técnico ha insistido en que "hay que levantarse y trabajar". "Solo pienso en preparar el partido de la próxima jornada porque no me rindo, sigo teniendo fuerzas para sacar esto adelante, por supuesto. No me rindo nunca, y menos hoy. Es verdad que hemos trabajado, hemos hecho todo lo que hemos podido, pero no me rindo", ha indicado.
Asimismo, en la rueda de prensa y tras el partido, ha aclarado Mel que no ha "hablado con los consejeros". "He estado con los jugadores, que están cabizbajos, incrédulos, tras un esfuerzo titánico".
En cuanto al análisis del encuentro, ha opinado: "Para mí el análisis está claro. En la primera parte hemos sido mejores, en los primero 30 de la segunda la Real ha sido mejor, en los últimos 15 hemos llevado el peso pero el final es cruel, más cruel no puede ser. Hubiera preferido perder 0-2. La Real tiene dos claras oportunidades en la primera parte, todo lo demás ha sido nuestro. Hemos ido otra vez a remolque, con las ansias, en la segunda parte nos cstaba. Con todo en contra hicimos 15 minutos buenos, lo demás ya sabéis... cruel".