El gozo del Betis B, en un pozo. Y es que el Córdoba ha hecho oficial este martes en un comunicado que su filial jugará en Segunda B y ocupará la plaza que deja vacante el Xerez, descendido por impagos en Tercera. Los verdiblancos, con el técnico Óscar Cano a la cabeza, serán pues compañeros de grupo de los azulinos.
El equipo califal, que cayó en la penúltima ronda de ascenso a Tercera ante el Granada B, tendrá que abonar una cantidad que oscila los 300.000 euros para jugar en la categoría de Bronce. Un objetivo que esperaba cumplir el filial del Betis pero al final le ha salido un duro competidor.
El 'proyecto Heliópolis' da así otro paso atrás, ya que el salto que deben dar los jugadores hasta Primera es aún mayor.