El entrenador de la Ponferradina, José Manuel Díaz, ha reconocido que espera a un Real Betis "dominador" en el partido que su equipo disputará, el próximo domingo, en el estadio Benito Villamarín de la capital sevillana. No obstante, la Ponferradina no va a estar dispuesta a permanecer "detrás de la pelota continuamente", ha advertido Díaz durante una rueda de prensa.
El entrenador, que mantiene la duda del extremo Pablo Infante, aquejado de molestias musculares, ha preferido un rival de las características del conjunto sevillano "porque nos beneficia que tenga la idea clara de tener la pelota y salir a jugar, sin que suponga tener que renunciar a ella". Díaz ve a un equipo verdiblanco "muy cambiado" del que perdió en la primera vuelta en "El Toralín" (4-1) "porque entonces estaba bastante acuciado por las prisas y la adaptación a la categoría", lo que a su juicio costó la salida al primer técnico, Julio Velázquez, pero Merino "puso sosiego" primero, con cuatro triunfos, y ahora con el conocimiento de Mel "tiene un estilo muy marcado como en su anterior época".
La Ponferradina se ha visto condicionada en el trabajo semanal por la presencia de la nieve y lluvia, lo que le ha obligado a tener que trasladar sus sesiones a un terreno de juego de hierba artificial, "donde la calidad de entrenamiento no se resiente, pero sí los jugadores en su espalda, abductores o cansancio". Precisamente esta circunstancia ha podido empeorar los problemas de Infante que podría ser, junto con el francés Camille, las únicas ausencias para el encuentro ante el Real Betis, aunque éste último ya haya entrenado con cierta normalidad y de cara a la próxima semana se incorporará "como uno más", ha señalado Díaz.
A pesar de la derrota ante el Sporting de Gijón, el técnico deportivista ve a su equipo "en buena dinámica" y con capacidad para "complicarle la vida" al conjunto verdiblanco.