La Fiore tensa la cuerda, el Betis no pierde la calma

La reunión entre Joaquín, su agente, Eduardo Espejo, y la Fiorentina ha terminado en las oficinas del club viola. Como era de esperar, el club italiano ha tensado la cuerda al máximo. Movimiento lógicos en una negociación de última hora, y mucho más cuando un club tiene la sensación de que no le dejan margen de maniobra, como es el caso de la Fiore, a quien Joaquín le ha echado un pulso en toda regla.

Así las cosas, lo primero que ha dicho la Fiorentina, para empezar a hablar, ha sido cuatro millones de euros. La cifra, evidentemente, está muy lejos de lo que está dispuesto a ofrecer el Betis. Empieza la partida de ajedrez y el reloj sigue avanzando. El traspaso de Joaquín se va a realizar. Nadie duda de ello, ni siquiera en la Fiorentina, pero es el momento de los negociadores, de la sangre fría. Una llamada más o una llamada menos puede valer un millón de euros. Maciá lo sabe y, de momento, está manteniendo una posición calmada, estratégica. Sabe que tiene al futbolista y eso es tener la sartén por el mango.
En principio, la oferta del Betis no superaría nunca el millón de euros y eso poniéndonos en el peor de los escenarios, ya que se está negociando un pago por objetivos en función de la clasificación del Betis las dos próximas temporadas. Con el jugador, como es bien sabido, no hay ningún problema. El acuerdo entre el Betis y Joaquín es total. El portuense firmará por tres temporadas cuando los dos clubes lleguen a un acuerdo.
Poco después de las seis y media de la tarde, Joaquín volvía con su agente a la sede de la Fiorentina. Lo dicho: partida de ajedrez.
El reloj sigue contando y los movimientos son constantes. Permanezcan en sintonía.