Fidelidad en kilómetros

Hablar de aficiones hermanadas en el fútbol español es hablar en verdiblanco y rojiblanco. Las hinchadas del Betis y del Sporting de Gijón mantienen una estrecha relación desde hace tiempo, lo que siempre genera un ambiente especial en las previas de los encuentros que enfrentan a ambos equipos. Dos aficiones de las mejores aficiones del fútbol español que comparten la misma filosofía de fidelidad y seguimiento a unos colores, sin importar el estadio en el que juegue su equipo. Así, no es de extrañar que en estas seis primeras jornadas de Liga, ambas hinchadas tengan el honor de ser las que más han viajado.

Y es que la del Betis es la segunda afición que más aficionados ha movido en lo que va de campeonato, con más de 4.000 béticos lejos del Benito Villamarín en total. En la segunda jornada en el Bernabéu, más de 2.500 hinchas verdiblancos se desplazaron a la capital para ver al club de sus amores. A pesar del amplio resultado a favor del Madrid, sólo se escucharon cánticos en clave verdiblanca en el coliseo madridista. Ya en la jornada 4, el Betis visitaba Mestalla y lo hacía acompañado por medio millar de béticos. Tampoco falló el beticismo en El Molinón, con cerca de 1.000 béticos que disfrutaron de la remontada de su equipo ante el Sporting.
Precisamente la del Sporting es la afición que mejor se ha desplazado en lo que va de temporada. La cifra roza los 5.600 rojiblancos lejos de El Molinón. Así, La Mareona llevó 600 seguidores a Anoeta, ante la Real Sociedad. En la jornada 4, como suele ser habitual cada vez que se enfrentan el Deportivo y el Sporting, cerca de 4.000 sportinguistas se dieron cita en Coruña, a pesar de que, en principio, el conjunto gallego mandó solo la mitad de entradas. Poco días después, ante el Rayo Vallecano, unos 1.000 aficionados estuvieron en el estadio madrileño.
Pocos van a olvidar lo que se vivió hace unos meses en el Benito Villamarín, con el ascenso in extremis del conjunto asturiano y las dos aficiones celebrando unidas la gesta. Este fin de semana, el ambiente fue igualmente festivo, con detalles tan bonitos como el aplauso que se llevó Joaquín de la grada local al ser sustituido en la segunda mitad, a pesar del 1-2 que campeaba en el marcador. Dos aficiones, en definitiva, cada vez más unidas.