Fichajes... que al final no lo fueron

Dicen que la historia siempre se repite, una y otra vez. Sea cual sea el ámbito de la vida en el se encuentre, el destino es caprichoso y vuelve a orientar las mismas coordinadas con diferentes protagonistas. Pues bien, en el Real Betis vuelve a darse el caso de apalabrar un fichaje que más tarde acabaría regresando al lugar de origen sin vestir la camiseta de las trece barras. David López es el último precedente de un ramillete de jugadores que llegaron a Sevilla y se marcharon sin rubricar el acuerdo.

El primero de ellos fue Alecsandro Barbosa, delantero brasileño. Corría el verano del año 2006 y el conjunto bético, presidido por aquel entonces por Ruiz de Lopera ya había alcanzado un acuerdo con el Palmeiras por tres millones de euros para hacerse con el jugador. Sin embargo, el equipo brasileño se arrepintió a última hora, pero lo que no pudo impedir es que el futbolista ya volara a Sevilla, a la que llegó en balde tras tener sellado la cantidad que iba a percibir en los cinco años que le vincularían a la entidad heliopolitana. Terminó jugando esa temporada en el Sporting Clube de Portugal en calidad de cedido.
 No iba ser el único que llegara a la capital de Andalucía para quedarse sin firmar por el Betis aquel agitado verano. Modeste M'Bami, pivote camerunés también se presentó en las oficinas del estadio verdiblanco para terminar de atar su fichaje por el club. El Betis estaba dispuesto a pagar 2,5 millones de euros al París Saint-Germain para contar con el internacional africano pero desavenencias a última hora en su contrato echaron al traste la operación. Jugó en el Olympique de Marsella y años más tarde fichó por la UD Almería.
Un año más tarde, en el verano del 2007 un nuevo ejemplo. El meta Marco Storari también fueron uno de esos futbolistas que volaron a la capital hispalense en vano. El italiano, que aún sigue en activo en las filas del Cagliari a sus 39 años, de disponía a fichar por la escuadra de La Palmera en calidad de cedido. Todo estaba cerrado hasta que Ruiz de Lopera decidió incrementar en un año más el periodo del préstamo. Aquel condicionante de última hora abortó el pase del meta, que terminaría jugando en el Levante. Además en aquella fecha declaró: "Estoy feliz de no haber fichado por el Betis. Si Lopera habla con todos los futbolistas como hizo conmigo seguro que no logra nada bueno. Los responsables del Levante tuvieron un trato mucho más serio conmigo". 
Las duras negociaciones del mandatario de El Fontanal encontraron otra 'víctima' en 2008: Nery Castillo. Justo este jueves (25 de agosto) se cumplen ocho años de su llegada a Sevilla. Incluso el propio portal web del conjunto bético anunciaba su desembarco en la entidad pero una vez más los repentinos cambios de condiciones en los dirigentes heliopolitanos de aquellos tiempos abortaron otra contratación.
El tiempo ha pasado y ocho veranos después, vuelve a repetirse el mismo episodio. David López llegó a Sevilla, pasó el reconocimiento médico pero no jugará en el Real Betis Balompié.