Álex Alegría, ante el espejo de Jorge Molina

En la delantera del Real Betis 2016/2017 irrumpe con fuerza el nombre de Alexander Alegría Moreno. Natural de Plasencia (Cáceres), el canterano se asienta en el primer equipo tras su cesión en el CD Numancia la temporada pasada. Con Tonny Sanabria al margen por lesión, el atacante extremeño ha refrescado la parcela ofensiva de la entidad. Su pose en el verde recuerda a Jorge Molina, que durante seis años acompañó a Rubén Castro en el frente de ataque. Con el tiempo transcurrido, el máximo goleador de la historia podría haber encontrado otro socio.

Autor de dos goles en lo que llevamos de campaña, Alegría se ha ganado a pulso un sitio en los esquemas de Gustavo Poyet. El propio entrenador heliopolitano advertía esta pretemporada del nivel derrochado por el joven delantero bético. La temporada inició y las circunstancias se han alineado a favor del ex del Cacereño. Debutó en Mestalla en la tercera jornada y una más tarde sería capaz de materializar dos tantos ante el Granada, los cuales servirían para rescatar un punto. El club ya trabaja para prolongar su contrato y espera cubrir su puesto en el equipo a largo plazo.
La parcela ofensiva del Real Betis ha vivido al margen del tiempo durante un buen puñado de años. En 2010 aterrizaron en el equipo Rubén Castro y Jorge Molina. Del canario poco queda por comentar, mientras que el alcoyano se hizo un sitio en los onces a base de trabajo y goles. No obstante, el actual jugador del Getafe tardó ocho jornadas en marcar su primer gol en Primera con el Betis. Lo hizo en un partido ante el Real Madrid. Aquella campaña materializó seis en total.
Una cifra que Álex Alegría tiene a tiro superar. Lleva dos y por delante 32 jornadas más para superar los registros de otro de los delanteros agigantados de los últimos años del Real Betis.