'Finales' de octubre para Poyet

Apenas han transcurrido ocho jornadas de Liga pero ya hay equipos de Primera División que no van por el sendero previamente marcado y estipulado. El Valencia CF y el Granada no cuentan en sus banquillos con sus entrenadores iniciales. Ni Pako Ayestarán ni Paco Jémez ocupan banquillos de la élite. Y en la picota dos nuevos preparadores. Osasuna y Real Betis se ven las caras el viernes en El Sadar en el que será un encuentro de especial relevancia para Gustavo Poyet. En el bando navarro, Enrique Martín tomó oxígeno ganando en Ipurúa. Aún así, sólo suma seis puntos de 24 y el choque contra los béticos se tacha de 'final' por evitar el descenso a final de temporada.

Gustavo Poyet no termina de dar con la tecla en el arranque de competición. Cuatro derrotas, dos empates y dos victorias dejan ocho puntos y una imagen difusa y carente de intensidad. Principal perjuicio del equipo. En el debe yace el esquema de juego. Fiel a su 4-3-3 (a excepción de dos partidos), los jugadores no cuajan en el verde y el mediocentro ha sufrido innumerables cambios de nombres en lo que se lleva disputado de competición. Arriba, la demarcación de Rubén Castro, el máximo goleador de la entidad, sigue estando en entredicho. Públicamente el futbolista canario reconoció que le gusta jugar por el centro, sin embargo, desde el cuerpo técnico insisten en pegar al delantero en banda para conservar el patrón de juego.
Con un reflejo deportivo turbio y con un punto de ventaja con respecto a la zona de descenso, los partidos que restan por disputar en octubre se avecinan de infarto para las opciones de Poyet. Prepara cambios para revertir la situación ante Osasuna y Espanyol. Dos equipos que, a priori, van a pelear por los mismos objetivos que el Betis: evitar el descenso.