Felipe Gutiérrez alarga el discurso de Poyet

Respira el Real Betis Balompié. Importante triunfo en Pamplona por 1-2 gracias al tanto in extremis de Felipe Gutiérrez. Tibio choque entre navarros y andaluces donde el juego brilló por su ausencia. Joaquín adelantó a los béticos a los 18 minutos aprovechando una medida asistencia de Petros. A pesar de todo, los de Gustavo Poyet supieron controlar las caóticas y desesperadas intentonas de Osasuna con un remodelado esquema inicial donde Rubén Castro se quedó fuera del once inicial. Un hecho que a la postre ha supuesto la tercera victoria del curso que sirve para estabilizar las aguas que bañan Heliópolis. El canario salió al terreno de juego a menos de diez minutos para el final

Gustavo Poyet enterró, a saber hasta cuándo, el 4-3-3 para dar cobijo al 4-2-3-1 con Petros y Jonas en la sala de máquinas, Felipe Gutiérrez y Cejudo como interiores y el omnipresente Joaquín como pieza móvil. Arriba la gran novedad fue la titularidad de Tonny Sanabria en detrimento del máximo goleador de la historia del club. Poyet aventuró cambio y así los hizo. Aunque no al gusto de todos. La mentalidad de los futbolistas, sin embargo, no mostró una excesiva mejora. Mismos errores, misma descoordinación y nervios de costumbre. El uruguayo sigue sin encontrar el sendero de juego y las dudas sobre su continuidad afloran cada vez más.
En el bando navarro, Enrique Martín apostó por el mismo once que consiguió la primera victoria del curso en Ipurúa ante la SD Eibar. Defensa de cinco hombres y Roberto Torres como canalizador. El jugador de Osasuna firmó el empate y ya lleva cuatro jornadas consecutivas viendo puerta. Muy meritorio observar un conjunto con un núcleo duro procedente de Segunda División competir con orgullo en la élite. 
El partido comenzó con el Betis mejor plantado. Como un efecto efervescente de adelantó en el marcador no sin antes probar fortuna CA Osasuna. Oriol Riera dispuso de la primera ocasión del choque a los 180 segundos con disparo carente de potencia que atraparía Adán sin dificultad, quien balbuceó ante el propio ariete catalán a la hora de patear un cuero en su propia área. Con la presión ya sacó réditos Sergio León el pasado lunes en Eibar. 
Mala participación de Nauzet Pérez. Salió a destiempo en el primer gol bético y no pudo repeler el disparo definitivo de Felipe
El que sí demostró el carácter habitual fue Petros Matheus. Intensidad, presencia e incluso asistencias medidas. El brasileño de destapó sirviendo un balón al desmarque de Joaquín. Sprint del portuense ante David García y picada por arriba frente a la desesperada salida de Nauzet. Con el gol bético, se apagó luz del equipo. No supo gestionar la renta pese a llegar al descanso con ventaja. Inexistente participación de Jonas Martin, que no acabó el duelo siendo sustituido por Darko Brasanac. Y es que la actitud del plantel verdiblanco no genera confianza. Excesivo miedo y falta de liderazgo y garra en situaciones claves.
Osasuna olfateó el miedo y metro a metros, yarda a yarda, fue asediado los dominios verdiblancos sin excesiva resistencia. A la media hora, Oriol Riera tuvo un franco cabezazo que Felipe Gutiérrez salvó bajos palos. Acto seguido, Sergio León armó un latigazo con la zurda que se marchó muy cerca del palo largo de la meta defensiva por Antonio Adán.

Impulso navarro en la reanudación

El segundo tiempo arrancó con sorpresa. Osasuna cosechó el momentáneo empate con gol de Roberto Torres. Cara de incredulidad en Gustavo Poyet que observaba como la película se truncaba. Internada de Berenguer. Centro-chute que se estrella en el palo y el rechazo le cae al osasunista que fusila a placer dentro del área. Los minutos pasaban y el el fútbol brillaba por su ausencia. Tonny Sanabria tendría una nueva oportunidad a los diez minutos de la reanudación con un disparo en área pequeña que abortó Unai García.
A cuentagotas iban a produciéndose las ocasiones y Joaquín se quedó sin gasolina en un mano a mano ante Nauzet tras una asistencia de Piccini. Dribló al cancerbero canario pero echó la pelota fuera cuando sus compañeros ya veían el gol. Hasta el tanto de la victoria, el choque se enmarañó con tarjetas, interrupciones y miedo a perder en ambas escuadras. El paraguayo Tonny Sanabria volvería disponer de una ocasión con la testa en un centro desde la banda izquierda de Álex Martínez.

Poyet se la jugó en la recta final con dos delanteros aprovechando la expulsión del galo Rivière, que tuvo una trifulca con Brasanac minutos posteriores a la entrada de Alegría y el canario. Cuando todo parecía encaminado a las tablas, ocurrió el milagro de la victoria para el Betis. Como agua de mayo se produjo el tanto que nadie esperaba. Cuatro minutos de añadido y falta al borde del área. Lanzamiento al fondo de las mallas de Felipe Gutiérrez al más puro estilo Vargas. Triunfo balsámico para Poyet que respira aliviado. Suma once puntos. La semana que viene aguarda la visita del RCD Espanyol en el Estadio Benito Villamarín. El juego no ha cambiado, pero con puntos, todo sabe mejor.

Todos los resultados en resultados.eldesmarque.com