El Betis y la vulnerabilidad defensiva

El Real Betis no termina de carburar en el terreno de juego. La irregularidad de resultados que atraviesa durante toda la temporada es consecuencia de falta de madurez del plantel, al menos, es la razón que esgrime Víctor Sánchez del Amo. Dos entrenadores, cambios de sistema en la búsqueda de una mejora que no ha llegado. Esta lunes, ante el CD Leganés, buscará paliar los números que arrastra en contra. Y es que el número de goles en contra que ha recibido el equipo sólo logra empeorarlo aquel plantel que descendió a Segunda División con 25 puntos.

Transcurridas 35 jornadas de Liga, el Betis de la temporada 2013/2014 llevaba encajados a estas alturas 70 goles. Actualmente esta cifra se sitúa en los 57 tantos. De este modo, nos encontramos ante la segunda peor defensa del siglo XXI. La segunda peor defensa en 17 años. Un mal que pesa como una losa y que impide el crecimiento de una entidad abonada a la mediocridad en los últimos años.
Ni siquiera el año del penúltimo descenso de categoría, temporada 2008/2009, llevaba encajados tantos goles a estas alturas. Acumulaba 56, uno menos que ahora. Y eso que este año el conjunto bético ha invertido en la parcela defensiva con los fichajes de Aïssa Mandi, Riza Durmisi y la contratación en el mercado invernal del rumano Alin Tosca. Muchas variantes en una zona que no han impedido frenar la hemorragia.