Es Noticia

La endeblez defensiva complica los puestos europeos

Los jugadores del Betis con la cabeza gacha (Foto: Kiko Hurtado).
ElDesmarque

Dicen que en el fútbol no hay imposibles, pero hay cosas que resultan muy complicadas creerlas si no las ves. Algo que se puede asemejar al objetivo que mantiene el Real Betis fijado en su cabeza, con la pugna por colarse en puestos europeos cinco años después. Un sueño que se antoja harto complicado merced a unos números que, incapaces de codearse con los colosos de la competición, son propios de un conjunto que lucha por no descender.

Los cinco goles encajados ante el FC Barcelona volvieron a dejar en entredicho a la retaguardia verdiblanca, con la quinta ocasión que reciben más de cuatro goles en la temporada. Valencia, Real Sociedad, Cádiz, Éibar y el Barça han sido los verdugos que encienden las alarmas por enésima vez en el Betis, ante un problema que no logran atajar desde hace más de una década. El conjunto blaugrana volvió a exprimir las carencias de una zaga que pide a gritos refuerzos, que registra números propios de un equipo de otra categoría.
Son 41 los goles que ha encajado el conjunto verdiblanco en la presente campaña, consolidándose como el tercer equipo más goleado de la competición. Unos números solo superados por Las Palmas y el Deportivo, dos conjuntos que se encuentran casi desahuciados en el sótano de la clasificación y que apuntan a un posible descenso a la división de plata. No obstante una posición que dista mucho de la que ejerce el Betis en la tabla y que resulta incompatible con querer entrar en Europa, y que podría equilibrarse o traer malos mayores en caso de cortarse la eficacia ofensiva.
Unos números que piden a gritos una remodelación y que parecen carecer de trabajo técnico. Si bien es cierto que el propio Setién ha admitido en varias ocasiones "no importarle" el número de goles encajados, la sangría defensiva comienza a traer de cabeza a la hinchada verdiblanca, que necesita consolidar una zaga que es vulnerable desde hace más de una década. Con la rampa de salida atascada los refuerzos comienzan a enquistarse y podrían condenar hasta el final de curso a una retaguardia retratada semana sí y semana también. 

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar