La indignación del Betis Deportivo por el gol no concedido

La suerte ha dejado de lado al Betis Deportivo en el presente curso, que no logra ver revertidas sus constantes críticas ante la polémica arbitral. En un encuentro que ahoga más si cabe al filial en la tabla, los pupilos de José Juan Romero se marcharon con un enfado tremendo tras un gol que debía haber subido al marcador y que el colegiado no decretó, pese a que el esférico llegó a rebasar con totalidad la línea de gol.

El encuentro no comenzó de la mejor manera para los cachorros de Heliópolis, a los que les tocó remar desde el principio tras el gol inicial de Juanfran. Un tanto que no descolocó en demasía los planes del conjunto verdiblanco, que logró reponerse y comenzar a rondar el arco del guardameta marbellí. El paso de los minutos apaciguó los nervios y esa confianza ascendente permitió a la parcela ofensiva llegar con peligro a campo rival.
El paso por los vestuarios refrescó las ideas de los pupilos de José Juan Romero, con una charla técnica que parecía surtir efecto con el gol que podría haber subido el empate al marcador rondando el minuto 50. Redru recibió en el flanco izquierdo y colocó un centro al área que terminó envenenándose y rechazando un defensor que envió el balón contra su portería. Wilfred no pudo atajarla y el balón se le resbaló rebasando por completo la línea de gol. Una acción que no vio con claridad el colegiado canario, dando continuidad a la jugada y desatando la desesperación de la plantilla bética, en un encuentro donde esos nervios terminarían saliéndole caro con las expulsiones del entrenador y Nacho González.
No fueron pocos los jugadores que mostraron su disconformidad, cuestionando la objetividad de un árbitro canario, curiosamente del mismo equipo que se juega la salvación con el Betis Deportivo. Así lo expresó José Juan Romero en rueda de prensa: "No hay ninguna duda. Hasta el propio portero se ha parado. Nosotros hemos exigido y cantado el gol porque, a pesar de que desde nuestra posición es muy difícil verlo, el mismo portero llama la atención con su gesto de que ha sido gol. Cuando hay una duda el portero suele sacar rápido el balón, pero se quedó porque es gol. Además, no es un gol que sea dudoso. Luego me expulsó porque soy el responsable del banquillo, por eso me expulsa. No sé qué árbitro nos pita nunca. Ahora acabo de enterarme de que este árbitro es de Canarias, con lo que está todo dicho".