El primer capítulo de un Betis campeón

La del Real Betis es una historia marcada por los desengaños, por la irregularidad y por la capacidad de caer al infierno para luego besar la gloria. Una trayectoria con un destino esquivo, que tuvo su primera dosis de grandeza hace algo menos de un siglo. Este 28 de abril es una fecha grabada a fuego y marcada en letras de oro para los miles de aficionados que han latido en verdiblanco en sus 110 años de historia pues ese día, en 1935, los verdiblancos se proclamaban campeones de Liga tras vencer por 0-5 al Racing de Santander en el antiguo El Sardinero.

El conjunto verdiblanco llegaba a la última jornada de ese campeonato con el sueño intacto, que terminó cumpliendo con un triunfo forjado con contundencia. Aquel Betis de Patrick O'Conell, que desde ese día pasaría por siempre a la historia de la entidad, salió con Urquiaga, Areso, Aedo, Peral, Gómez, Larrinoa, Saro, Adolfo, Unamuno, Lecue y Caballero. Tres goles llevaron la firma de Unamuno, en un encuentro en el que también marcaron Lecue y Caballero.
Una victoria que generó el triunfo de David contra Goliat y que demostró lo que sería la historia del conjunto verdiblanco de ahí en adelante, pues logró sucumbir a todo un Real Madrid, que aunque presionó hasta la última jornada, fue finalmente segundo. El Betis de los vascos, así apodado, logró la gloria jamás vista en la ciudad, desatando la locura de miles de aficionados que se marcharon al Real de la Feria para recibir con honores y celebrar el que fue el primer capítulo de un Betis campeón, aunque la 'Flecha Verde' tardó dos días en llegar.