Una leyenda que recorre el mundo entero

Dicen los más románticos de Heliópolis que no es el aficionado quien escoge su equipo, sino que es el Real Betis quien lo elige a él. Y hay veces que incluso se cumple. Así se resume la historia de siete aficionados ingleses que apenas hace un mes se cruzaron en el camino con el conjunto verdiblanco y que caminarán juntos por siempre. Quizás cosas del destino o una simple casualidad.

En una tarde del pasado mes de mayo, este grupo de amigos se reunió en un pub británico en busca de una nueva aventura. En un sombrero, que terminaría siendo 'mágico', estos introdujeron papeles con los nombres de algunos equipos de las ligas de mayor nivel de Europa. "Vamos a convertirnos en hinchas incondicionales del que saquemos para el resto de nuestra vida... ¡Lo amaremos! Nos compraremos la camiseta, iremos al menos una vez a verlo al año. Nos habremos convertido en aficionados de pleno derecho".

Casualidades del destino... Allí salió. El Real Betis nombraría su nuevo destino, una forma distinta de sentir el verdiblanco, impensable pero real. Un juego que hizo nacer el sentimiento de siete aficionados de Godmanchester, un pueblo cercano a Cambridge y que va camino de hacerse realidad, pues ya buscan vuelos para disfrutar de la aventura verdiblanca en Europa y visitar el Benito Villamarín.

Y cómo no, todo aficionado al Real Betis que se precie debe tener una bandera con el color que tiñe su sentimiento, con las trece barras 'hermanadas' con el Godmanchester Rovers, equipo local con el que 'comparte' lugar en esa insignia. Más de 2.000 kilómetros de distancia que ya tienen algo en común, su amor los colores verdiblancos, y que no son más que una simple distancia que impide la unión física de ambas partes, porque sentimentalmente estos siete británicos ya tienen un hueco guardado en el corazón de muchos aficionados verdiblancos.

Y es que al final van a tener razón, es el Betis quien te elige.