David Ruiz
Sevilla, 3 ago .- El extremo japonés Takashi Inui ha encontrado en el capitán del Real Betis, Joaquín Sánchez, su principal "padrino" para adaptarse a la idiosincrasia verdiblanca y ya participa como uno más en los videos que el club comparte por redes sociales.
El Betis, más allá de los ambiciosos objetivos deportivos que tiene esta temporada, en la que vuelve a la Liga Europa, ha aprovechado para expandirse en el mercado asiático la contratación de uno de los jugadores más emblemáticos de Japón, Takashi Inui.
Inui, de 30 años, llegó al Betis como jugador libre tras acabar contrato con el Eibar, equipo con el que disputó tres temporadas y en las que anotó 11 goles y dio 12 asistencias.
El japonés, que ha sido una de las revelaciones del pasado mundial de Rusia con su selección, concentró una gran masa social y mediática en las dos presentaciones que ha efectuado como jugador verdiblanco, el 12 de julio en Tokio y el 26 del mismo mes en el estadio Benito Villamarín.
En la presentación que tuvo lugar en su país, Inui confesó sentir predilección por uno de los referentes del beticismo, Joaquín Sánchez, al que deseó "conocer de cerca para saber cómo puede mantenerse así a los 36 años".
Joaquín, desde su regreso al Betis en 2015 y, especialmente, desde la llegada de Quique Setién como entrenador, ha recobrado su mejor nivel como futbolista, al que ha acompañado con una forma de ser cercana, divertida y amistosa que desde el club han potenciado en sus redes sociales.
El Betis ha generado el contexto ideal para que Joaquín sea la bandera de los valores del club -cercanía, humildad y competitividad- y es el encargado de "apadrinar" a cada fichaje verdiblanco.
El ejemplo más reciente de ello fue el acontecido este miércoles, en el que el club mostró imágenes del capitán del Betis, junto a otros jugadores como el central Marc Bartra o el propio Inui en un ambiente distendido con una de las capitanas de la selección española femenina sub-19, Rosa Márquez, jugadora del Betis Féminas y reciente campeona de Europa.
El buen talante y el sentido de humor de Joaquín Sánchez es evidente y demuestra el extraordinario ambiente que se vive en el vestuario del Betis, que quedó patente en la broma que el capitán protagonizó con Takashi Inui.
Joaquín, al presentar a Inui a Rosa Márquez antes de hacerse una fotografía, le pidió al japonés que abriera bien los ojos, petición que el nipón recibió de buen grado y cumplió para desatar las risas y bromas del resto de compañeros.
Gestos así no hacen más que ejemplificar el excelente ambiente que se vive en la plantilla verdiblanca, que facilita la adaptación de los recién llegados, como Inui, y que tienen en Joaquín el principal referente al que seguir para desarrollar en el terreno de juego su mejor nivel como futbolista.