Se marchitó el sueño del Infantil B del Real Betis. Una ambición que no termina con esta derrota (1-3), pues aún restan muchos objetivos por cumplir en el destino de unos pequeños guerreros que darán que hablar en el futuro. No obstante el destino fue caprichoso y los verdiblancos se quedaron a un paso de la final de la XXIII edición de LaLiga Promises. Su verdugo, el Real Madrid, al que curiosamente le endosaron una goleada en la fase de grupos.
A pesar de las lágrimas de desilusión por no estar en la gran final, estuvieron cerca de transformarse en alegría, pero tampoco pudo ser. El Betis arrancó de maravilla su encuentro ante el PSG gracias a los goles de Javi y Juan, pero le terminó dando la vuelta el cuadro parisino. Un doblete de Senny, uno de Warren y otro de Maeta Konte doblegaron a un conjunto verdiblanco, que terminó apretando y metido en el choque debido a otro chicharro de Javi.
Al final 4-3 y un orgullo tremendo para el beticismo presente en Arona, que lo despidió a grito de "campeones, campeones". El PSG acaba LaLiga Promises como tercer clasificado y el Betis como cuarto.
Antes de eso...
Los primeros compases fijaron el guión inicial planteado por los dos equipos. El conjunto dirigido por Manolo Martínez empezó fiel a su propuesta, a la arenga, monopolizando el dominio del esférico, madurando las jugadas con paciencia y jugando de un lado a otro en busca de encontrar los huecos necesarios para hacer daño a su rival.
Así llegaron las dos primeras ocasiones del Real Betis, con un mano a mano y un disparo a la media vuelta que no lograron ver portería... Y en estos casos perdonar se acaba pagando caro. Dos minutos dorados del Real Madrid dinamitaron la cita y Guillermo y Álex adelantaron a los madridistas antes del descanso.
El tiempo de refresco calmó las ideas del Betis, que salió más atrevido en la segunda mitad. Aunque fiel a su estilo, los heliopolitanos fueron más verticales y comenzaron a percutir con más peligro en el marco rival. No obstante esos espacios los aprovechó Jacobo para dictar sentencia con el 3-0, gracias a una brillante picadita.
Pero este Betis nunca se rinde y no bajó los brazos hasta el final para 'morir' con orgullo. Incluso llegó a recortar distancias, gracias al tanto de Adri tras un brillante centro medido de Rosa. Con poco menos de 10 minutos por delante, los verdiblancos lo intentaron con más corazón que cabeza pero el tiempo terminó apretando y desinflando sus ilusiones.
Una derrota amarga que no empaña la brillante actuación del Real Betis en esta Liga Promises, de la que se marcha siendo la sensación del campeonato. Un sueño marchito que abre muchos más por cumplir. Y es que en esto del fútbol, siempre hay una nueva reválida...