El Betis de los grandes escenarios para cerrar la temporada
El Betis acabó la temporada con un triunfo de tronío, el que consiguió contra el Real Madrid en el Santiago Bernabéu (0-2). Pese a que el partido era descafeinado, ya que ni unos ni otros se jugaban nada, nunca amarga un dulce y eso es lo que hizo el equipo verdiblanco que fue mejor que su rival y ofreció su versión de los grandes escenarios.
Los heliopolitanos han conseguido en la misma temporada vencer en San Siro ante el Milan (1-2), el Camp Nou frente al Barcelona (3-4) y ahora contra el Real Madrid en el Bernabéu (0-2). Un estadio, por cierto, en el que encadenan su segunda victoria consecutiva, después que ganaran el año pasado también en feudo blanco.
Es verdad que una cosa no quita la otra y el gran objetivo del Betis, el de clasificarse para Europa la temporada que viene, no se cumplió y un partido no puede cambiar ni un ápice el análisis del curso. Sin embargo, si acotamos lo sucedido en los últimos noventa minutos, los de Setién ganaron con merecimiento, con sus habituales señas de identidad, de dominio de balón y asociaciones.
Loren y Jesé, curiosamente los delanteros en los que tantas miradas hubo durante la temporada por su falta de gol, fueron los autores de los tantos en dos grandes jugadas. Dos acciones que llevaron el denominador común de la excelencia en el pase inicial de Lo Celso, el mejor jugador sobre el césped.
Pau López volvió a la portería del Betis después de varios partidos de ausencia. Además del catalán, las novedades en el once verdiblanco fueron Mandi y William Carvalho que ocuparon los puestos de Tello y del sancionado Joaquín. Tres cambios en una alineación que también varió el dibujo táctico, ya que el técnico cántabro volvió al sistema de tres centrales.
La puesta en escena del Betis en el Bernabéu fue la del equipo que se crece y se gusta en los grandes escenarios. De la mano de un extraordinario Lo Celso, los verdiblancos se adueñaron de la pelota y del ritmo del partido durante los primeros 25 minutos. El Real Madrid sólo podía perseguí la pelota y fiar todo su ataque a un ruidoso Vinicuis. Claro que en ese rato, sólo de acciones de cierto peligro, como alguna pared entre Guardado y Kaptoum, o un par de lanzamientos de Marcelo.
El choque viró con un Real Madrid que comenzó a disputarle la pelota al Betis. Justo en esa fase llegó un carrusel de ocasiones en las dos porterías. Empezó con un disparo envenenado de Bartra que hizo que Keylor Navas se tuviera que forzar (27’). Replicaron los blancos con un balón al palo de Benzema (33’) tras un claro error de Francis.
El duelo siguió encadenando oportunidades y Lo Celso ejecutó una magnífica vaselina, tras un gran control, después de una asistencia de Junior (33’). Otra vez apareció Keylor Navas. Precisamente el lateral pudo marcar en un cabezazo (37’), en el que tal vez se vio demasiado solo en una jugada a balón parado. Lo Celso, de lejos, también probó fortuna antes del descanso (40’).
Los goles en la segunda parte
Tras el descanso, con el paso de los minutos los de Zidane hicieron jugar más a los béticos en su propio campo. Vinicius avisó en el 56' en un acción que quebró a Mandi y paró Pau. El Betis también encontraba espacio a la espalda de la defensa del Madrid. En una de estas Carvajal derribó a Junior, en una acción en la que los de Setién pidieron más que la amarilla.
Poco después marcó el Betis con un remate certero de Loren (60') tras asistencia de Guardado. Todo nació de un exquisito pase al hueco de Lo Celso. El argentino pudo hacer el segundo (67') con un disparo lleno de intención en una contra. Keylor Navas evitó el gol. Repitió el centrocampista con un ajustado tiro que se fue fuera por poco (68').
Zidane dio entrada a Isco y Asensio y cada uno de ellos disfrutó pronto de una ocasión de gol en dos minutos consecutivos (69' y 70'). Setién movió el banquillo y puso en el campo primero a Jesé y luego a Tello. Precisamente el canario anotó el segundo tanto ante su exequipo (74'). Otro gran pase al hueco de Lo Celso habilitó a Junior que dio el pase de la muerte.
El Betis había herido ya al Madrid, que lo intentaba más por orgullo que por capacidad. Un pase de Tello (78') fue interceptado por el portero blanco. Los de Setién encontraban muchos espacios para tocar y buscar balones al hueco con Lo Celso a los mandos, secundado por William Carvalho y Guardado. Los verdiblancos cerraron el partido sin grandes sobresaltos.