Sergio Canales ha mostrado en el Betis una gran regularidad en su rendimiento. El talento del centrocampista siempre destacó desde joven, aunque también tuvo momentos de irregularidad en los inicios de su carrera. Ahora goza de una madurez futbolística que viene por muchos detalles, entre ellos, algunos de los secretos que el centrocampista desvela en esta charla con ElDesmarque.
Fue a raíz de las importantes lesiones que padeció, ya dejadas en el olvido, cuando Canales apostó por incorporar a su vida un 'coach' deportivo que le ayuda. También la alimentación forma parte del trabajo oscuro del jugador, más allá de los entrenamientos meramente deportivos y futbolísticos. El cántabro nos habla de estas cuestiones.
- Cuida hasta el último detalle. Uno de sus secretos es el trabajo con un 'coach deportivo'. Cuéntenos cómo es esa rutina.
- Empecé hace tres años, o un poco más. Lo suelo hacer una vez a la semana más o menos. Empecé, sobre todo, por el tema de la rodilla. La tercera vez fue complicado y me ayudó mucho a evadirme de dolores y de otras cosas. El objetivo a nivel futbolístico era encontrar más regularidad. Los jugadores de mis características somos intermitentes o un poco fríos. Me pasaba eso. Yo quería ser constante y evitar eso. No jugar bien un partido y otro no, o dos sí y uno no. Quería ser constante, tener regularidad y me ayudo mucho.
- ¿Cómo encontró este camino?
- Fue cuando me rompí el tercer cruzado. Me puse a estudiar 'coaching' deportivo. Era mi tutor. Hice buena relación con él. Terminé un máster y decidí empezar una vez a la semana con las sesiones. Hablar del partido anterior, de lo que venía después, de cuáles eran las sensaciones, de cosas que habían pasado partido, de qué podía mejorar...
"Lo suelo hacer una vez a la semana más o menos. Hablar del partido anterior, de lo que viene después, de cuáles eran las sensaciones, de cosas que habían pasado partido, de qué podía mejorar..."
- Le da mucho valor, por tanto, también al aspecto mental y psicológico en el fútbol...
- Cualquier detalle que le puedas sumar es muy importante. Es un conjunto. Si estás preparado de una manera pero físicamente no estás, no vas a dar el nivel en la élite. Si táctica o técnicamente no estás, vas a correr como un pollo sin cabeza en el campo. Con toda la igualdad que hay es buscar darle un salto a un momento puntual de un bajón. O un día que estás jugando y te preguntas por qué el otro día mi cabeza iba rápido y hoy más lento. O darme trucos durante los partidos. Das tres pases mal y piensas que ya no estás. Intentar evitar eso es importante y creo que lo he conseguido.
- ¿Se lo recomendaría a otros futbolistas?
- Cada uno es diferentes y conocer lo que cada uno necesita. Yo lo supe a raíz de las lesiones. Yo soy de una manera de jugar, otro de otra. Los hay más competitivo o menos. No soy nadie para recomendar nada. Cuento mi experiencia.
- ¿Ha pensado dedicarse al mundo del 'coach' deportivo en un futuro cuando se retire?
- No lo descarto, si puedo ayudar a gente... El fútbol son experiencias y amistades. Si luego puedes ayudar siempre estaré encantado. Ahora mismo es complicado. Tienes que conocer en la persona.
- Ha hablado de esos momentos de las lesiones. ¿Cómo los vivió, ahora que los ve desde la distancia?
- Fueron recuperaciones complicadas. Hubo momentos que jugaba ya y decía es imposible que vuelva a estar al ritmo de Primera. Hubo trabajo escondido y seguir creyendo. Ir por las tardes a entrenar y pensar que va a llegar.
- ¿Pensó en algún momento en dejarlo?
- Hubo varios momentos. Una vez me dijo el doctor incluso que igual que no iba a volver a jugar. Eran momentos complicados. Soy cabezota. Pensé que igual lo dejaba, pero que no fuera por esto. Que fuera porque me hubiera cansado, porque no me gustara el año siguiente... pero no por esto. Encontré gente a mi alrededor que me conoció rápido y vio lo que necesitaba en cada momento. Que estés rodeado de gente buena hace mucho.
- Otro detalle que cuida es la alimentación...
- Ya hace muchos años que lo cambié y que me puse más encima de ello. Estar al detalle. Fue hace tres o cuatro años, también a la vez que lo del 'coach'. Fue por las lesiones y los dolores que tenía para quitarlos. Me ayudó y luego por rendimiento deportivo que es muy importante.
"En casa sí que somos muy cuidadosos con lo que comemos. A mi mujer también le gusta y a nuestros hijos le queremos enseñar eso. No lo tenemos como una obligación, lo disfrutamos"
- ¿Es muy estricto con lo que come?
- En casa sí que somos muy cuidadosos. A mi mujer también le gusta y a nuestros hijos le queremos enseñar eso. No lo tenemos como una obligación, lo disfrutamos. Fuera de casa es más difícil. Por el ocio, las amistades te llevan a salir y comer, en España es así. Te adaptas, pero en casa somos más cuidadosos.
- ¿Nos puede poner un ejemplo, hay algo que no pueda comer en su dieta?
- No es dieta en sí. No es lunes una cosa, martes otra... es más comida antiinflamatoria. Sin saber, porque yo confío en la persona que me lo hace, es intentar evitar comidas que te puedan inflamar músculos o articulaciones. Desayuno arroz rojo con leche de arroz, por ejemplo, intento no tomar lácteos o gluten. No es que no tome, pero intento que el consumo sea reducido. Un poco va por ahí.