No están siendo tiempos fáciles en todo el mundo, y en estos momentos toca despedir a un recordado jugador del Real Betis Balompié de la década de los 70, Attila Ladinszky, futbolista húngaro que vistió la camiseta verdiblanca entre 1975 y 1978, formando parte del equipo que ganó la Copa del Rey de 1977, aunque no jugó aquella competición por su condición de extranjero.
Attila Ladinszky ha fallecido este jueves en Budapest, la capital de Hungría, a los 70 años de edad. Ha estado ingresado prácticamente un mes en la UCI del hospital Janos de Budapest, donde trataba de recuperarse de unos graves problemas cardiacos que no tenían nada que ver con el Covid-19.
El Betis ha querido recordarle en un web oficial con un obituario. Así reza el pésame publicado por el club:
El Real Betis Balompié muestra su máximo pesar por el fallecimiento de Attila Ladinszky, jugador de nuestro Club de 1975 a 1978, acaecido en Budapest (Hungría) el 14 de mayo de 2020, a la edad de 70 años.
Nacido en Budapest el 13 de septiembre de 1949, Attila Ladinszki debutó con 18 años en la Primera División de su país, defendiendo los colores del Tatabanya, siendo traspasado de inmediato al poderoso Vasas.
Un año más tarde huyó de la Hungría comunista para establecerse en Alemania Federal, donde comenzó a jugar en el Rott Weiss Essen. Su enorme proyección como futbolista lo llevó a los grandes equipos de Holanda y Bélgica, siendo figura importante en el Feyenoord y en el Anderlecht. En ambos clubes destacó por su facilidad goleadora y con este último se proclamó máximo goleador de la Liga belga, además de ganar la Liga y la Copa.
Ficha por el Real Betis en 1975 a sugerencia del entrenador bético Ferenc Szusza, debutando en partido oficial el 6 de septiembre de 1975 en el estadio de Atocha de San Sebastián, marcando uno de los goles del equipo verdiblanco.
Delantero rápido y potente, que lo mismo podía actuar en el eje del ataque que en la banda izquierda, fue muy apreciado por la afición bética durante las tres temporadas que permaneció en Heliópolis.
Actuó en el Real Betis en calidad de apátrida y aunque desde el club se pretendió que adquiriera la nacionalidad española nunca llegó a confirmarse este propósito. Precisamente por su condición de extranjero fue por lo que no pudo participar con el Real Betis en la obtención del título de Copa de 1977.
Sus mejores momentos con el equipo verdiblanco llegaron en el año 1977. De una parte, haciendo el gol del triunfo que le permitió al Real Betis ganar en el Bernabéu después de 42 años y, de otra, marcándole tres goles al eterno rival en la final del Trofeo Ciudad de Sevilla de ese año.
De cualquier modo, Ladinszky siempre confesó que el gol del que conservaba mejor recuerdo fue el que obtuvo en noviembre de 1976 contra el Atlético de Madrid. Un prodigioso cabezazo de enorme belleza plástica.
En el ejercicio 1977/78 se agravaron sus discrepancias con el entrenador Rafael Iriondo y eso acabó provocando su salida del club al final de la campaña. En las tres temporadas que jugó en el Real Betis, Attila Ladinszky disputó 60 partidos oficiales, marcando 18 goles.
Posteriormente, alargó su carrera hasta mediados de los años 80 en distintos equipos de Bélgica, Francia y Portugal. En noviembre de 2017 recibió el homenaje que el club y la Asociación de Ex Jugadores le tributaron a la plantilla que ganó la Copa de 1977 y, a pesar de la distancia, siempre se mantuvo muy vinculado a sus compañeros y a la entidad.
Nuestro más sincero pésame a sus familiares.
Descanse en paz Attila Ladinszky.