Borja Iglesias está llamado a ser una de las grandes referencias del Real Betis cuando se reanude LaLiga. El ariete no ha logrado demostrar sobre el campo el porqué de su fichaje. Algo que quiere revertir.
28 millones de euros pagó por él el Real Betis en verano. Una cantidad que le ha generado presión, por lo que quiere devolver esa confianza: "Es tremendo. Yo sentí mucho orgullo. A mi me parecía una locura. Yo simplemente me dedico a jugar al fútbol. Que alguien decida que lo que haces está valorado en esas cantidades es un orgullo. Es cierto que conlleva una presión y hay que canalizarla pero la verdad es que siento mucho orgullo. Siento una responsabilidad que quiero devolver. Me siento muy afortunado, estoy donde quiero estar", ha comentado en una entrevista para Esquire.
Este curso apenas acumula tres goles. Un hándicap para su rendimiento, aunque en algunos aspectos se siente mejor que el pasado curso: "Es difícil porque nuestra vara de medir es el gol igual que para el portero es dejar la portería a cero. Pero somos afortunados porque si marcas en una situación aislada, al final todo el mundo recuerda que metiste ese gol. Es verdad que no estoy siendo tan efectivo de cara a puerta y no he tenido tantas ocasiones, pero me siento mejor jugador que la temporada pasada. He crecido en muchos aspectos del juego".
"Es cierto que de cara a portería no estoy siendo lo efectivo de otros años y tampoco he generado las ocasiones de otros años. Trabajo para generar más peligro, tener situaciones. Sé que si tengo situaciones de gol, si tengo cinco ocasiones alguna fallaré pero acabaré haciendo goles. Hay días que llegas a casa y dices cómo va a ser, si ni he chutado a puerta", añadió Borja Iglesias.