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Edgar: "Nunca había jugado de pivote"

Siguiendo al Real Betis y al Sevilla FC

La posición de Edgar González en el primer equipo del Betis ha sido una sorpresa para muchos, con esa función en algunas fases del juego en defensa y otras muchas en mediocampo. Probablemente también para el propio futbolista que reconoce en la entrevista con ElDesmarque que nunca había jugado en mediocampo. Ningún entrenador en categorías inferiores lo había adelantado.

Sí desvela que su padre, Lluís González, quien también fue futbolista, le había dicho en alguna ocasión que ahí podría tan desenvolverse. Su posición en el campo, su evolución en el Betis en dos años, las sensaciones previas a su estreno en Primera contra el Valencia, o compartir vestuario con Joaquín son otras de las cuestiones de las que charlamos con Edgar en este fragmento.

- Llegó al Betis hace dos para jugar en el filial. Si echa la vista atrás ahora que juega con el primer equipo, ¿se imaginaba estar en la situación en la que está en estos momentos?

- Sí y no. Cuando llegué lo hice con ambición de esto, de llegar al primer equipo, tener minutos y convertirme en jugador de la primera plantilla. Sabía que era muy complicado. Venía de Segunda B, del Cornellá, un equipo muy humilde y cuando me llamó el Betis no tuve ninguna duda porque me atraía el club y la afición.

El año pasado empecé haciendo la pretemporada con el primer equipo y fue un cambio muy grande de venir de Segunda B. Siempre he tenido esa ambición. Sé que he sido un privilegiado de poder entrenar durante un año y medio hasta que he podido debutar en Primera. He aprendido mucho de todos los jugadores del primer equipo. La plantilla es de mucho nivel, lo era el año pasado y lo es ahora. Para mí era un aprendizaje diario fijarme en jugadores que son de nivel top. He intentado estar preparado por si llegaba la oportunidad y poder aprovecharla. Estoy contento de cómo han ido las cosas. Han influido muchos factores, no sé si también he tenido suerte, dos años atrás no sé si me hubiera imaginado estar en esta situación, pero era mi ambición y mi objetivo.

 "Recuerdo que estaba un poco nervioso hasta que empecé a calentar. Luego ya me olvidé un poco de todo", explica Edgar sobre las sensaciones previas a su debut en Primera contra el Valencia

- El primer año debutó en Copa del Rey con el primer equipo, este curso comenzó como capitán del filial y estreno en Primera División. ¿Cómo ha vivido todo eso?

- El año pasado me llegó la oportunidad en la Copa del Rey. Lo recuerdo con mucho cariño porque era el debut, aunque no fuera en LaLiga pero el debut con el primer equipo del Betis en un partido oficial. Luego no volví, aunque fui convocado alguna vez más en otra ronda de Copa. Se me quedó un poco la espinita de no dar un poco más para quedarme en el primer equipo directamente.

Este año la pretemporada intenté aprovecharla. Para los canteranos es importante poder compaginar el filial y poder competir los fines de semana. La fórmula es aprovechar los minutos con el filial y rendir, ser de los mejores en el filial para poder intentar ganarte la oportunidad en el primer equipo. Sin ganártelo antes las cosas no llegan porque sí. Este año lo tenía claro con mi papel de capitán tenía que rendir al máximo y ayudar al equipo. Creía que con ese trabajo diario podía llegar la oportunidad.

- Este año se estrenó en Primera contra el Valencia. Un partido complicado, con el Villamarín lleno y, además, juega de titular. Sitúese en las horas previas. ¿Qué sensaciones recuerda?

- Fue una semana muy ilusionante, también de muchos nervios. Supe un poco antes que tenía esa posibilidad que el míster me comentó cuando se acercaba el partido. Desde el primer momento tanto él como los compañeros me transmitieron confianza en los entrenos. Los momentos previos al partido fueron de bastantes nervios, de ganas, porque quería que llegara, pero nervios porque debutar en Primera era un momento importante para mí y tenía que aprovecharlo. Recuerdo que estaba un poco nervioso hasta que empecé a calentar. Cuando empecé a calentar ya me olvidé un poco de todo y me centré en lo que era el partido. Lo recuerdo con cariño, también el partido por cómo salió y me sirvió para coger experiencia y mejorar como futbolista que es lo tengo que hacer ahora mismo.

Rubi conversa con Edgar (foto: Kiko Hurtado).

- Se le ve un futbolista con temple, pese a que ha debutado este año en Primera. ¿Es una de sus cualidades?

- Puedo transmitir esto jugando. Una vez que empiezas el partido te concentras y te olvidas un poco todo del entorno. Es un partido con rival mucho mejor al que estaba acostumbrado en Tercera, también con unos compañeros de un nivel altísimo. Eso te facilita las cosas. Dársela a jugadores como Canales, por ejemplo, te hace mejor a ti. No sé si puede ser una de mis características, transmitir esa tranquilidad. Por dentro sí estaba nervioso en los momentos previos, durante el partido me concentré, pensé lo que me pidió el míster y lo que tenía que hacer para el equipo y estaba contento de cómo salió.

- Una de las situaciones que más ha llamado la atención es su posición. ¿Había jugado alguna vez antes como pivote en mediocampo? 

- Nunca. Había entrenado este año alguna vez, pero ni en categorías inferiores ni en el filial había jugado ahí. Sí había sido una posición que me había llamado la atención. Incluso mi padre me había dicho que me veía en esa posición, que creía que ahí podía rendir por mis características, pero nunca ningún entrenador me había probado en esa posición. Cuando el míster me lo comentó le dije que no había jugado nunca ahí, pero que yo por ilusión y ganas lo daría todo, en esa posición o en la que fuera. Me he sentido muy cómodo desde el principio. Tengo margen de mejora, sé que tengo que mejorar en muchas cosas, aunque sé que se gana también con la experiencia y con los minutos. He evolucionado mucho desde el primer partido que jugué contra el Valencia hasta el último del Madrid. He tenido un crecimiento que te dan los minutos que he jugado. Es una posición nueva, tengo que coger inteligencia táctica y conocimientos pero me he sentido muy cómodo y me gusta.

- Rubi ha resaltado de usted en alguna ocasión su inteligencia...

- En esta posición, más un jugador de mis características que igual no soy muy rápido en velocidad de reacción, tengo que suplirlo un poco con estar bien colocado siempre. Es importante anticiparte a la jugada que va a suceder. Por eso decía que en el caso de Piqué eso lo hace perfecto y me he fijado mucho a lo largo de mi vida. Sobre el pivote es una posición que tácticamente hay que dar balance al equipo en la situación que toque. Si tienes que ponerte en defensa de tres, o avanzar la posición. Es un poco saber lo que pide el juego y el equipo, e intentar interpretarlo. Por eso te decía que cuanto más minutos y partidos, más crecimiento tendré.

Edgar y el hecho de jugar en mediocampo: "Ni en categorías inferiores ni en el filial había jugado ahí. Sí era una posición que me llamaba la atención y mi padre me había dicho alguna vez que me veía ahí"

- ¿Quién le ha llamado más la atención de los compañeros al entrenar y jugar con ellos?

- Es un privilegio entrenar y aprender de ellos. Todos son grandes profesionales y para estar tantos años en Primera tienen que ser muy buenos, pero también grandes profesionales y fuertes mentalmente por la presión que hay. Yo siempre me he fijado en muchos. En el caso de la que era mi posición de central en Bartra, Zou Feddal, Aissa Mandi, Sidnei… todos son grandes jugadores. En el caso del pivote, Javi García, William Carvalho son jugadores que tienen un recorrido increíble en esa posición. También jugar con Joaquín, que es una leyenda del fútbol español, es un privilegio. Al final de todos puedes sacar conocimientos y aprendizajes, no sólo en lo futbolísitico, también en lo personal. Todo lo que envuelve la Primera División, el saber gestionar la presión. De todos puedo aprender y tengo que hacerlo como jugador que acabo de llegar. Es algo que me va beneficiar mucho.

- ¿Qué me dice de la convivencia en un vestuario con alguien como Joaquín, cómo es?

- Igual que se le ve. Es muy natural, una persona muy alegre, como se le ve, que une al vestuario. Con sus bromas, pero con su seriedad cuando se tiene que trabajar. Es una forma de trabajar alegre, pero a su vez para tener la edad que tiene y estar dando el rendimiento que está dando es porque es un gran profesional que se cuida mucho. En eso también es un ejemplo. Se puede ser un gran profesional siendo muy alegre y transmitiendo la alegría que une mucho a todos los jugadores en el vestuario.

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