Es Noticia

¡Al suelo, que vienen los nuestros!

Expandir v
Periodista especializado en fútbol y baloncesto.

La frase se le atribuye a Pío Cabanillas, político español durante la dictadura y la transición democrática: "¡Al suelo, que vienen los nuestros!". Su ingenio trataba de retratar con ella el peligro que a veces pueden esconder las acciones de quien se supone está en tu mismo bando. No muy lejos habrán ido esta noche los pensamientos de Manuel Pellegrini viendo a su nuevo Real Betis dinamitar ante el Getafe CF las expectativas generadas en los tres partidos anteriores.

Porque, más que el Getafe, el enemigo bético en el Coliseo Alfonso Pérez Muñoz fue él mismo. No todo, pero sí determinados jugadores cuyas intervenciones se tornaron letales para un bloque en crecimiento. Ese crecimiento rebrotará o se apagará definitivamente en función de la habilidad que tenga el director deportivo, Antonio Cordón, para proveer al entrenador chileno de mimbres propios para un buen cesto.

La tarea requiere una capacidad soberana, ya que resta poco tiempo para el cierre de un mercado complicado y el Real Betis no puede presumir precisamente de nadar en la abundancia económica. No obstante, urge como el comer para paliar las deficiencias de un plantel que no es tan malo como parecía la temporada pasada, pero quizá tampoco tan bueno como ha parecido en las tres jornadas precedentes.

La insensatez de dejarse llevar por la euforia se ha topado de bruces con Bordalás y su tropa de abducidos por la intensidad. El estilo Pellegrini se consolidará o no, eso será o seró, pero para hacerlo tendrá que mostrar su capacidad para domar bestias futbolísticas como este Getafe turbio y machacón. Y eso se antoja casi utópico si se afronta la encomienda haciéndole caricias y guiños al bicho.

El algodón de Bordalás no engaña

El cuadro madrileño encarna la expresión máxima de la competitividad. Es el fútbol de élite con presupuesto de regional. Ganarle requiere de unos mínimos sin los cuales no estamos hablando de nada: concentración, intensidad, picardía, dureza...nada de eso tuvo el Betis en una noche reveladora. Porque el algodón de Bordalás no engaña.

Pretender competir ante un enemigo de esas características regalándole un gol antes del cuarto de hora, perdiendo balones estúpidos y dejándole llevar el partido a donde quiere supone una quimera. Tres tiros en contra en la primera parte y tres goles. Un tiro a favor en el mismo periodo; y encima a cargo de un lateral derecho de circunstancias. Así, chungo.

En cualquier caso, tan insensato sería ahora agarrarse al catastrofismo absoluto como lo ha sido durante tres semanas deleitarse con el azúcar de la autocomplacencia. La buena pinta que parece que puede tener este nuevo Real Betis no se vio ante el Getafe CF. Las malas noticias: una imagen paupérrima y la reminiscencia de pasados atroces. La buena: ya no hay que jugar contra el Getafe hasta la segunda vuelta. Entretanto, que alguien le dé motivos a Pellegrini para no tirarse al suelo porque vienen los suyos.

Escribir comentario 2 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar

  1. Paquito

    Como manipulan la imagen del fuera juego de Moreno ponen el fotograma cuando tiene la pierna er más afuera...seremos béticos pero fili....no compadre

  2. Ratón Colorao

    Dos partidos con dos de los de arriba y en los dos se lleva 3 goles juasjuasjuas y claro ahora saldrán a decir ke mira ke malo es el palangana o ke de importancia venir a comentar a las noticias del glorioso y blablabla,pero AUTOCRÍTICA 0 eso seguro ,hoy ke ha sido ,el árbitro??,la biriprensa??la Mafia?? La expulsión de mandi?? En fin más de lo mismo ,un ekipo al ke le empiezan a llegar los ke van a pelear por esas plazas europeas ,ahora un Valencia desmontado ke al menos saber a lo ke juega , saludos 6️⃣🏆