Seguía el Real Betis, pasada una hora de partido, sin saber cómo meterle mano al Deportivo Alavés. Ganaban los vitorianos por 0-2 y aguantaban los ataques de los de Manuel Pellegrini sin excesivos problemas. Pero un acción de pillo de Fekir permitió abrir la lata. Tras una internada de Emerson por la derecha, Rubén Duarte cortó el pase atrás del brasileño. Buscaba el lateral a Fekir, quien se había quedado parado en forma de desmarque. Pero no se quedó el francés quieto cuando vio el pase abortado, sino que fue a por el balón mientras el rival rearmaba el despeje final. Metió la puntita y Duarte le dio a él en lugar de al balón.
El colegiado Alberola Rojas no lo dudó. Estaba perfectamente situado y señaló el punto de penalti. No hubo que recurrir al videoarbitraje que, no obstante, chequeó la acción por si se hubiera escapado algo. En la repetición se confirmaron todas las sospechas. Tampoco hubo dudas sobre quién debía lanzar la pena máxima: Borja Iglesias. Fekir se lo había fabricado, pero dos fallos recientes desde los once metros lo apartaron de la lista.
Pilleria cuando es al revés penaltitos enga ya