Nueve años recordando a Miki Roqué

El 24 de junio de 2012 se escribió una de las páginas más tristes de la historia del Real Betis. Aquella tarde, Miki Roqué nos dejó tras una lucha ejemplar contra un cáncer en la pelvis que lamentablemente no pudo superar.

El 'eterno 26', formado en los escalafones inferiores del Lleida, emigró muy joven a Inglaterra. El Liverpool, encandilado por el fino y elegante central, se hizo con sus servicios. Allí, con Rafa Benítez en el banquillo, Roqué se convirtió en el jugador más joven en debutar con el conjunto 'red' en Liga de Campeones, ante el Galatasaray en 2006. Todo un hito.

Tras varias cesiones, el central catalán llegó a la entidad heliopolitana para reforzar al filial en julio de 2009. Su buena campaña hizo que Pepe Mel, entrenador bético por entonces, le hiciera debutar en la categoría de plata con el primer equipo. Fue en la séptima jornada liguera ante Las Palmas. Desde entonces, fue uno más en los planes de Mel, logrando un gol ante el Girona en su primer partido como verdiblanco en el Benito Villamarín. La gran proyección de Roqué se detuvo a principios de 2011 cuando se le detectó el cáncer. Tras más de un año de lucha, el central partió al cuarto anillo del coliseo verdiblanco, dejando conmocionado a todo el mundo del fútbol.

Su pérdida sigue siendo irreparable nueve años después. No obstante, Roqué siempre estará ligado al Real Betis y su afición, pues ambos se encargan de recordarle en ese emotivo minuto 26 en cada partido que disputa el equipo verdiblanco.