La ilusión de Manu Morillo

La pretemporada es al fútbol lo que bien podría ser septiembre al calendario académico. Etapas de nuevos comienzos y nuevas oportunidades. En ambas se va a ver involucrado este verano un joven bético de apenas 17 años. Manu Morillo se encuentra entre los 11 canteranos citados para participar, como mínimo, en el primer stage de la pretemporada. Siendo uno de los nombres que más ilusión siembra en el seno verdiblanco.

Ilusión a raudales

El ariete de Sanlúcar la Mayor siempre ha destacado en las categorías inferiores por su facilidad de cara a portería y, sobre todo, por su compromiso con la entidad. Pese a que su localidad natal se encuentra a menos de 30 kilómetros de distancia de la Luis del Sol, Morillo se decantó por convivir con sus compañeros de equipo en la residencia prácticamente desde sus comienzos en el Real Betis. Una importante decisión enfocada en priorizar sus estudios y su formación deportiva, lo que habla de las ganas de triunfar del atacante. Este año pone fin a su etapa en la residencia bética y volverá a casa.

En una nueva muestra de entrega por las trece barras, Morillo, quien ya está recuperado de una lesión muscular que le obligó a dar por finalizada su temporada en el pasado mes de diciembre, ha comenzado a entrenar antes de tiempo. Víctor Camarasa compartió el pasado martes una imagen en la que aparecían junto a él, Dani Martín y el mencionado Morillo. Los tres futbolistas, con ganas de agradar en esta pretemporada, se ejercitaron en el Felipe del Valle de San José de La Rinconada, estadio en el que el Betis Féminas actúa como local en Primera Iberdrola.

Manu Morillo es el fiel reflejo de la ilusión que genera la pretemporada en los más jóvenes. Una oportunidad única, pero que no levantará los pies del suelo de un futbolista que ha demostrado, desde sus inicios, una gran madurez.