Diego Lainez no termina de encontrar su sitio. Desde que saliese de su país, el mexicano ha visto diluida la progresión que se le presuponía, siendo su ausencia en el Mundial de Qatar el último gran varapalo a su carrera. Un golpe difícil de asumir para el jugador del Real Betis, ahora cedido en el Sporting de Braga, quien estaba llamado a liderar la nueva generación de México. Algo que, de momento, no ocurre.
En Heliópolis nunca terminó de encontrar su sitio. No lo hizo con Setién a su llegada y tampoco con Rubi ni Pellegrini. Una tesitura que le obligó a salir este verano, buscando en Portugal el protagonismo y los minutos que no tenía aquí. El Real Betis y el Braga acordaron este verano una cesión con opción de compra cercana a los 7 millones, guardándose el conjunto verdiblanco el 20% de los derechos del jugador en caso de traspaso.
Por el momento no parece que se pueda materializar esa compra, pues apenas ha participado en seis partidos de la liga portuguesa y ni siquiera ha sido aún titular con el Braga. Un ostracismo que obligó al Tata Martino a dejarle fuera del Mundial. Muchas voces críticas de México han valorado la necesidad de que el jugador regrese a su país para recuperar su mejor versión y pretendientes no le faltan.
En estas últimas horas ha ganado fuerza un presunto interés del Rayados de Monterey. De hecho ha sido el propio José Antonio Noriega, nuevo director deportivo del equipo, el que desvelaba tal posibilidad. "Siempre. Un club como Monterrey tiene que tener en el radar a jugadores de Selección Mexicana y que están en Europa. Por supuesto que sí. Lo que pasa es que a veces se puede y a veces no", comentó para La Hora de Willie.