Descongelando las ilusiones

Las victorias cambian hasta la temperatura. De la fría noche del Coliseum el Betis salió con el calor de un triunfo que es oro en paño después de los últimos resultados. Un solitario gol de Borja Iglesias de penalti, en el tramo final del duelo, determinó un encuentro que iba camino del empate y de alargar una racha inquietante.

Claro que el gen ganador del Betis apareció, más allá de las sensaciones. Fiel a sí mismo. El Betis nunca pasa más de tres partidos sin ganar esta temporada y no podía romper ese dinámica. Tras lo sucedido en la Supercopa de España, la Copa del Rey y el partido ante el Espanyol, volvió a sonreír para llevarse tres puntos vitales. Ya habrá tiempo de elevar el nivel.

Los partidos contra el Getafe en su estadio, por más que el nombre de Alfonso Pérez siempre esté ligado a la felicidad en el Betis, son ásperos. Los verdiblancos lo sabían. El rival andaba necesitado y con su entrenador con la soga al cuello. Así que el equipo de Pellegrini se puso el mono de trabajo en una noche, dicho sea de paso, sin demasiada brillantez bética.

El dominio heliopolitano no se transformaba en profundidad ni ocasiones. Alguna de Luiz Henrique, como el cabezazo de la primera mitad, y poco más. Fekir con su salida cambió el paso ligeramente aunque el fantasma del problema del gol volvió a sobrevolar el imaginario bético. No era cuestión de remates, sino de generación de juego.

Pero en estas una mano de Duarte llevó al Betis al punto de penalti donde Borja Iglesias es infalible. Quedaban cinco minutos y el Panda no falló. Ese golpe fue certero y letal, después de un partido sólido a nivel defensivo, con Pezzella liderando el centro de la zaga verdiblanca. Tres puntos que son un tesoro a falta de un compromiso para cerrar la primera vuelta.

La alineación del Betis no contó con la presencia inicial de Fekir, quien regresaba a una convocatoria tras su lesión. En total fueron cinco las novedades del equipo bético respecto al que jugó una semana antes contra el Espanyol. Para empezar Pellegrini varió la portería con la entrada de Rui Silva. Sabaly, Miranda, Luiz Felipe -tras cumplir sanción- y Rodri fueron los otros cambios.

De un simple saque de banda generó el Betis la primera ocasión. Borja Iglesias se plantó en el mano a mano ante David Soria pero venció el meta local (1'). Los primeros compases del duelo mostraron la curiosa posición de Canales partiendo desde la derecha y con Rodri en ubicaciones más centrales. Los verdiblancos dominaban, pero el ritmo de juego era lento.

Djene, con un cabezazo en un córner, generó la primera inquietud a la zaga bética (17'). De testarazo a testarazo, Luiz Henrique ejecutó después uno más peligroso tras un medido centro de Canales que se fue fuera por poco (17'). Alguna acción del cántabro, cada vez con más libertad para moverse, fue lo mejor de los de Pellegrini aunque sin grandes acercamientos.

La falta de veneno arriba lo ejemplificaron dos acciones. Una que no acabó Borja Iglesias (28') y un remate desviado de Rodri (30'). Atrás no había demasiados problemas y Pezzella lideraba la zaga con contundencia y concentración. Más dificultades había para hilvanar juego de un Betis que acumulaba posesión pero al que le faltaba chispa. Frío como la noche.

Segunda parte

Sin cambios en el descanso, Aleñá fue el primero en buscar portería rival con un disparo que atajó Rui Silva (49'). El Betis seguía espeso y Luiz Henrique, con una jugada individual, trató de espabilar al equipo y lanzó un trallazo que se marchó fuera (53'). El Getafe daba la impresión de querer ser algo más incisivo en la segunda parte.

Las oportunidades eran escasas en ese punto del partido. Por eso Pellegrini decidió mover el árbol y dio entrada a Fekir y Juanmi por Rodri y Luiz Henrique. El francés no estuvo fino en su primera jugada con un lanzamiento de falta alto (72'). Más intención llevó el tremendo trallazo lejano de Guido Rodríguez rechazado por David Soria (74').

No terminaba el Betis de meter la marcha extra para desarbolar a los azulones. Sabaly encañonó alto una acción en la que Fekir trató de desequilibrar (82'). Una mano de Duarte en el área abrió el cielo para los verdiblancos. Borja Iglesias, desde el punto de penalti, transformó el 0-1 (85'). Oro molido. El Panda, acto seguido, dejaba su puesto a Willian José.

Un acrobático remate de Juanmi, tras un tiro de Sabaly, sirvió para rondar el segundo (89').  Pellegrini trataba de cerrar el encuentro y daba entrada a Edgar por William Carvalho. Un cabezazo de Ünal en el descuento amenazó el resultado (94'). Nada. Ya no se le podía escapar al Betis este triunfo que tanto valor ofrece en estos momentos.