Borja Iglesias fue uno de los protagonistas de la salida del Betis del Villamarín tras el empate ante el Real Madrid. El delantero se paró a firmar autógrafos durante muchos minutos, sin dejar a nadie colgado. Sin que ningún fan llegara a casa sin su preciado botín. Una actitud que no se cumple en la mayoría de futbolistas. Es evidente que los hay de todo tipo, más o menos dispuestos a ese trato con los hinchas. Pero lo de Borja Iglesias es dar un paso más. Siempre con una sonrisa en la cara y siempre dispuesto a satisfacer a los que le animan.
Cuando le preguntamos que en 25 años no hemos visto a un jugador así, humilde, Borja Iglesias responde: “Bueno, Joaquín es muy simpático también”. Hay que darle la razón porque el capitán es otro de los que más se para. Pero es que la actitud de Borja es algo extraordinario. “Yo también he estado en el otro lado y me gustaba que se parasen”. Concluye ‘El Panda’, dejando clara su postura.
El Betis empató a cero en la visita del Madrid, con un buen partido de los de Pellegrini, que tuvieron sus ocasiones incluso para haberse llevado los tres puntos. El equipo sigue quinto en LaLiga Santander, al acecho de la cuarta plaza que daría acceso a Champions. Una cuarta plaza que está a tiro: solo tres puntos les separan de la Real Sociedad. Por su parte, Borja Iglesias está cuajando una temporada espectacular. Con 10 goles en 22 jornadas, el delantero ha igualado ya la cifra conseguida la temporada pasada en 33 partidos. Además, este curso añade a sus números tres asistencias, cuando en la campaña pasada no había conseguido ninguna. Europa, la única asignatura pendiente este año, al no haber anotado ningún gol en los cuatro partidos que ha jugado. Tendrá la oportunidad esta misma semana en el cruce de octavos ante el Manchester United, nada menos que en Old Trafford.