Joaquín se perdió la gesta de Morante en la Feria de Sevilla: “Me tiraba de los pelos en casa”

Si Joaquín Sánchez volviera a nacer, quizás no sería el gran capitán del Real Betis Balompié, sino un torero de clase. Ese era su primer sueño antes de ser futbolista, y siempre se ha destacado como un gran aficionado a la tauromaquia.

Hasta este Jueves de Farolillos Joaquín no pudo acudir a la Real Maestranza de Caballería para la feria taurina de Sevilla. El partido del martes ante la Real Sociedad y la comida de la plantilla en el Real del miércoles impidieron que estuviera antes poblando los tendidos del coso del Arenal.

De hecho, el propio Joaquín ha confesado que podría haber estado el Miércoles de Farolillos en La Maestranza, en un día que pasó a la historia de la tauromaquia al cortar un rabo Morante de la Puebla, algo que no sucedía en Sevilla desde hacía 52 años, pero finalmente no pudo estar presente. “Me hubiera gustado venir antes, pero mi profesión no me lo ha permitido. Ayer que tenía para venir no pude y me tiraba de los pelos en casa. Hoy he tenido la suerte de venir disfrutando de este bonito marco”, explicaba en palabras a MundoToro TV, que buscaba a uno de los protagonistas más demandados en las últimas semanas tras anunciar su retirada de los terrenos de juego.

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“Un enamorado y un loco de la tauromaquia, de todo lo que conlleva el ser taurino. Y mucha relación con Pablo, por supuesto, hemos coincidido mucho en el campo y a ver si tiene suerte él y los dos compañeros”, añadía el futbolista, comentando su amistad con Pablo Aguado, uno de los integrantes de un cartel que tuvo como gran triunfador a Tomás de Rufo, que salió a hombros por la Puerta del Príncipe. El otro espada en la undécima corrida de abono de la Real Maestranza fue José María Manzanares.