El Real Betis ha vivido este sábado una mañana muy especial en un entrenamiento celebrado a puertas abiertas en el Benito Villamarín. Una oportunidad que los béticos, con muchos niños entre ellos, han aprovechado para poblar las gradas del estadio heliopolitano con unos 13.000 aficionados presentes en ellas.
Desde temprano, más de una antes de que se abrieran las puertas del Benito Villamarín, había béticos haciendo cola para entrar. A las 10.30 horas arrancaba la sesión con la salida de los jugadores, mientras se oía en las gradas a capela cantar el himno de equipo. Un momento especial que acabó en aplausos antes de ponerse manos a la obra.
Sin Marc Roca, Nabil Fekir y Ez Abde se pusieron a entrenar los de Manuel Pellegrini. Tampoco estuvieron otros lesionados como Claudio Bravo, Sabaly, que en algunos días se ha unido al grupo, Héctor Bellerín, Marc Bartra y Guido Rodríguez. Precisamente el argentino fue objeto de uno de los cánticos de los béticos. Volvió a sonar el "Guido quédate". También para Chadi Riad, quien se ha ganado a los aficionados con su rendimiento.
Bufandas, balones o camisetas fueron lanzados por los futbolistas del Betis a las gradas a las que se acercaron. También hubo momento para algunas fotografías de recuerdo. Todo en una mañana muy especial en el Benito Villamarín en uno de los pocos entrenamientos que los aficionados pueden presenciar de su equipo. Ahora las miradas ya se centran en el estreno de 2024, que será ante el Celta de Vigo en Balaídos el 3 de enero.
Locos de la cabeza