El Betis prepara la visita del Celta de Vigo con tres bajas

El Real Betis ha iniciado la preparación del encuentro frente al Celta de Vigo, que el próximo viernes, a partir de las 21.00 horas, visitará el Benito Villamarín. Un duelo de necesidad absoluta para los de Manuel Pellegrini, obligados a ganar si quieren seguir vivos en la pelea por Europa. Aunque el Valencia haya recuperado la séptima plaza, el conjunto heliopolitano, que en trece días visitará Mestalla, sigue dependiendo de sí mismo para como mínimo recuperar esa posición de privilegio, argumento más que suficiente para obtener tres puntos el viernes, en un encuentro que el equipo, de momento, afronta con hasta tres bajas.

Las tres mismas ausencias en el Betis

William Carvalho, que este domingo cumplía 32 años, recibió el pasillito de sus compañeros. Al igual que ocurriese durante toda la semana pasada, el Real Betis sigue entrenándose con las ausencias de Chimy Ávila, Marc Roca y Marc Bartra. Aunque el central ya está en la fase final de su recuperación, después de esa gravísima lesión en el tendón de Aquiles, habrá que esperar algunos días más para verlo reintegrado con sus compañeros. La semana pasada alternó trabajo de campo con ejercicios en la cámara antigravedad, pero en el club se toman su vuelta con cautela. Lo más positivo, que ya toca balón.

Marc Roca sigue al margen del grupo. No participó en ninguna de las sesiones de la semana pasada y tampoco lo ha hecho este lunes. El centrocampista está siguiendo un plan específico junto a los readaptadores del club y ya puede correr con aparente normalidad. A lo largo de los últimos días ha estado alternando el gimnasio con la cámara antigravedad y si todo va según lo previsto, antes de la visita del Celta de Vigo podría reincorporarse de manera paulatina al grupo.

La tercera ausencia en discordia es la de Chimy Ávila, aunque de todas formas estaría sancionado para el duelo del viernes. El argentino sufre una lesión miotendinosa proximal de isquiotibial izquierda. Esta es exactamente la misma dolencia que aquejó Isco Alarcón entre febrero y marzo, por lo que el delantero argentino estará entre seis y ocho semanas de baja. Según cómo evolucione, podría estar disponible para penúltima o incluso última jornada, pues sería casi utópico, a tenor de los precedentes, verle jugando ante Las Palmas. Un contratiempo tremendo para los intereses del club, que pierde a uno de sus baluartes ofensivos. Dice adiós al tramo más importante de la temporada.