Una nueva preocupación para Zinedine Zidane. El técnico francés del Real Madrid, que parecía haber encontrado el antídoto perfecto para olvidar el debate creado alrededor de la delantera, podría perder una de sus piezas ofensivas en los próximos días: Gareth Bale tendrá que pasar pruebas médicas este jueves.
El galés, que se marchó en el tramo final del encuentro ante el Dortmund con aparentes molestias, parecía que apenas tenía nada grave, sin embargo, según El Golazo de Gol, los problemas del delantero se han producido en los isquiotibiales y no en el gemelo, tal y como se informó tras el partido. Así, será sometido a pruebas médicas este jueves para conocer el alcance de su lesión.
Las alarmas en la enfermería blanca, encendidas.