El delantero galés Gareth Bale, que se convirtió en la gran figura del partido amistoso que el Real Madrid ganó por 2-1 a la Roma correspondiente a la Copa Internacional de Campeones, dijo que todo el equipo había trabajado "muy duro".
Bale, elegido Mejor Jugador del Partido, que salió de titular y disputó 56 minutos, brilló de manera especial en el manejo del balón, sus pases y su poder físico a la hora de cubrir espacios.
Su labor como líder fue decisiva después de que a los 95 segundos de haber comenzado el partido le pusiera un balón de oro a Asensio para que este lo pudiese controlar, se fuese hacia el arquero de la Roma, Robin Olsen, y lo batiese con el 1-0.
Luego llegaría su exhibición individual cuando al minuto 15 puso el 2-0 en el marcador después de mostrar una gran velocidad, desborde y disparo que dejó sin opción a Olsen en su intento de evitar el gol, el segundo que conseguía en el torneo tras haber marcado el primero frente a la Juventus, que ganaron por 3-1.
"Lo que hemos demostrado en el campo es el resultado de lo duro que trabajamos todos los días para mejorar", destacó Bale al concluir el partido.
El internacional galés también recordó que dentro del equipo hay un nuevo entrenador que tiene una filosofía muy clara de lo que quiere que hagan los jugadores cuando están en el campo.
"Tenemos un nuevo entrenador, que trae nuevas ideas y trabajamos todos los días para mejorar", reiteró Bale. "Estamos haciendo lo que él nos pide, marcamos goles y ganamos los partidos".
Bale destacó que dentro del equipo había un gran ambiente y el convencimiento de que tenían que seguir trabajando y luchando al máximo.
"Hacemos lo que nos pide el entrenador, así que vamos bien", subrayó Bale. "Hay que seguir mejorando y estamos con muchas ganas de comenzar la nueva temporada".