El Real Madrid cayó derrotado este sábado ante el Barcelona en el Santiago Bernabéu en el encuentro correspondiente a la jornada 26 de LaLiga Santander.
El cuadro blanco estuvo en todo momento en el partido y fruto de la tensión por lo apretado del marcador surgieron algunos roces entre distintos futbolistas de entre los que destaca el protagonizado por Messi y Ramos en la primera mitad, al borde del descanso.
El camero golpeó al argentino en la cara y éste se lo recriminó encarándose ambos. El colegiado no le sacó ninguna tarjeta por ese lance y Ramos tras el partido aclaró que el golpe no fue intencionado y que así se lo hizo saber a Messi.