Zinedine Zidane sabe que no está siendo nada fácil para Florentino Pérez lo de aligerar la plantilla del Real Madrid. El club blanco ha hecho una gran inversión de 300 millones de euros y por ahora solo ha recuperado 100 de esos millones con las salidas.
La lista de descartes que dio el entrenador francés está casi al completo en el equipo y solo Marcos Llorente ha salido de los cuatro grandes señalados.
Keylor Navas sigue, Dani Ceballos sigue y Gareth Bale también sigue.
De hecho, Florentino Pérez ha intentado colocar a los tres sin demasiado éxito debido a sus altísimas fichas y parece que el guardameta de Costa Rica y el centrocampista andaluz pueden quedarse finalmente en la plantilla.
El Real Madrid no ve claro encontrar un guardameta de nivel para ser el suplente de Thibaut Courtois y el fichaje de Paul Pogba está cada vez más complicado.
Eso motivos harían que los dos se quedasen, pero el caso de Gareth Bale es totalmente diferente. Zidane ya le ha dicho un "te vas" más que claro, pero el galés se ha plantado con un "no" igual de rotundo.
El día que Zinedine Zidane se reunió con Gareth Bale para comunicarle que no contaba con él, el francés no dijo nada, simplemente fue a hablar con Florentino Pérez, quien lo trajo al Real Madrid.
Ese día le comunicó al presidente blanco que si querían sacarlo del conjunto blanco sería para ir a un equipo de Champions League en el que le mantuvieran el sueldo.
Bale no quería saber nada de ofertas exóticas por muy onerosas que fueran y parece que Florentino Pérez no le ha encontrado comprador.
Ahora el delantero galés está demostrando que está muy en forma, que no quiere irse y sigue sin compradores. Será difícil echarlo.
Ni vestirlo. El Banquillo que ni lo huela. Que se aburra y apartarlo hasta en los entrenamientos.