El futuro de James Rodríguez no está, ni mucho menos, decidido, pero lo cierto es que todas las señales hacen indicar que estará en el Real Madrid. Y eso que, hasta hace una semana, se daba por hecho que sería el nuevo galáctico del Atlético de Madrid.
Diego Pablo Simeone le había convencido y todo estaba pactado. El cuadro colchonero pagaría 50 millones de euros y el colombiano firmaría para las cinco próximas temporadas, con un sueldo cercano a los 10 ‘kilos’ limpios anuales. Solo faltaba la firma y el anuncio oficial.
El ‘Cholo’ ya tiene a tres jugadores con pasado madridista como Marcos Llorente, Álvaro Morata y Mario Hermoso, todos ellos criados en ‘La Fábrica’. La afición ya se lo echa en cara al presidente y no le perdonarían que hubiese un cuarto nombre en esa lista.
Por tanto, ahora todo apunta a que se pondrá a las órdenes de Zinedine Zidane, y de hecho, ya se entrena como uno más. La lesión de Marco Asensio y las probables salidas de Lucas Vázquez y Gareth Bale le abren una puerta para permanecer en el equipo.
A pesar del giro de los acontecimientos, en el Wanda Metropolitano aún no dan por perdido al ex del Bayern de Múnich y creen que, hasta el dos de septiembre, momento en el que el mercado echa el cierre en la Liga Santander, puede ocurrir absolutamente de todo.
El Atleti esperará a que el Madrid realice alguna incorporación para el ataque y acepte la venta de James. El jugador, por su parte, le ha prometido a Simeone que rechazará todas las ofertas.
Solo quiere ir al Manzanares.