La (no) salida de Neymar del PSG ha sido la noticia más destacada del mercado de fichajes ya concluido. El futbolista brasileño mostró al cuadro francés en varias ocasiones que su deseo era el de abandonar el club galo y volver a España siendo el FC Barcelona su destino preferente pero no descartando la opción de jugar en el Real Madrid.
En esas, y según revela Marca este martes, el padre del futbolista, al ver que la opción de regresar al Camp Nou se tornaba en imposible, apuró las opciones de ver a su hijo vestido de blanco. Llamó y sondeó todas las opciones posibles, pero no logró que el Real Madrid pusiera toda la carne en el asador para cerrar esta operación.
Más allá de que la operación habría supuesto una inversión enorme para el club merengue, en la entidad capitalina, según la misma información, desconfiaban sobre el estado físico del futbolista que ha sido martilleado por las lesiones desde que firmara por el PSG en el verano de 2017.
El Real Madrid era consciente de que todos los esfuerzos del Barcelona por concretar el regreso de Neymar eran volcados por el PSG y sabía que estaba ante una gran oportunidad para llevarse al futbolista, pero no le vieron hueco en la plantilla al no haber cerrado ventas importantes y, tal y como se ha dicho antes, no confiaban en su estado físico.
En el Real Madrid, según el medio anteriormente citado, cifraban la operación en unos 500 millones de euros, cantidad inabordable. El club blanco contempló con el PSG la posibilidad de que el futbolista jugara en el Santiago Bernabéu como cedido corriendo la entidad gala con el sueldo del jugador en caso de que cayese lesionado, pero la negativa de su equipo hizo que el Real Madrid se mantuviera al margen en las dos últimas semanas de mercado.