¿Estalla la bomba? Y es de Hazard

El Real Madrid dejó una imagen para olvidar la temporada pasada. Los blancos firmaron una de las peores campañas de la historia del club de la capital.

Fue el resultado de la mala planificación por parte de los responsables, que no reaccionaron con la suficiente contundencia a las salidas de Zinedine Zidane y de Cristiano Ronaldo. Sobre todo ante la del luso.

La ausencia del delantero en el equipo se notó en gran medida. Ningún crack fue capaz de asumir ni el liderazgo del portugués ni su cuota goleadora.

La primera parcela quedó en parte cubierta por Sergio Ramos, que fue el único que intentó marcar la pauta. Pero no al nivel del carácter que imprimía el de Madeira. El de Camas no era una amenaza constante al rival como sí era CR7.

En cuando a la segunda carpeta, los llamados a ser los relevos de Cristiano, no aparecieron.

Los cracks esconden la cabeza

Gareth Bale debía ser el heredero de Ronaldo. Para eso lo fichó Florentino en 2013. Pero nada más lejos de la realidad. El británico no fue esa referencia que necesitó el Real durante toda la temporada.

Tampoco se puede decir que Karim Benzema diera la cara. El galo firmó un gran final de temporada, pero firmó un de sus campañas más irregulares desde que está en Chamartín. Tuvo rachas de 10 partidos sin marcar y de hasta siete sin ni siquiera chutar a puerta.

También había esperanzas puestas en Marco Asensio. Un jugador que con sus primeros meses en el Madrid deslumbró al mundo. Muchos situaron en la lucha por el Balón de Oro en los siguientes años. Pero no se recuerdan muchos casos jugadores que se diluyeran en tan poco tiempo como el mallorquín. Y el que dijera que no era él el que tenía que tirar del carro dejó claro hasta donde se podía contar con el mediapunta.

Desconfianza en Hazard

Un problema que debería ser historia con la llegada de Eden Hazard. El belga es el crack que Zidane ha querido como su nuevo Cristiano Ronaldo. De hecho, ya lo pidió en su primera etapa en el banquillo blanco.

Pero en el club no las tienen todas con el ex del Chelsea. Cada vez son menos los que le ven como relevo de Cristiano y más los que consideran que no es el galáctico que ha vendido Zidane a los responsables. Opinan que no es el líder que lleva necesitando el equipo desde la marcha de CR7. No tiene el perfil de jugador que se cargue al equipo a la espalda cuando las cosas no van bien. En resumen: no es el nuevo Cristiano Ronaldo.

Hazard se la juega en su regreso

El inicio de la Liga Hazard lo ha pasado lesionado y todavía existen esperanzas de que sea capaz de guiar al equipo como en su momento lo hizo el luso. Pero son bien pocas.

Además, no olvidan el estado físico nefasto en el que llegó en verano y no creen que sea mejor después de haber pasado más de un mes lesionado. Y esta opinión está corriendo como la pólvora en el club. Y también entre la afición. “¿Nadie lo va a contar?” empiezan a cuestionar en la grada, donde la desilusión con este nuevo proyecto es cada vez más latente.