Sergio Ramos es un tema candente en el Real Madrid. Su rendimiento preocupa, pues lleva varias temporadas de capa caída, y en esta temporada las cosas no han comenzado mucho mejor. Ya ha tenido varios errores de bulto y no da la sensación de seguridad defensiva de antaño. Algo lógico e irreprochable, pues el tiempo pasa y no perdona a nadie, sin excepciones.
A sus 33 años, sus mejores campañas ya quedaron muy atrás. Y, de hecho, el capitán ya ha mostrado su predisposición a cambiar de aires y firmar un último gran contrato antes de colgar las botas en alguna liga exótica que le bañe en oro. Este verano ya pidió la carta de libertad para poder marcharse a China, donde le ponían un salario de locura que acababa con sus problemas económicos de por vida.
Pero Florentino Pérez no accedió. Cree que ya no disponía de tiempo para reemplazarle y lo aplazó un año. Pero ahora ya está advertido y lleva meses moviéndose para dar con la tecla. Kalidou Koulibaly, Milan Skriniar, Matthijs de Ligt, Leonardo Bonucci… los nombres han sido varios, pero ahora hay sobre la mesa una opción bomba.
Y esa es la de Virgil van Dijk. En el Santiago Bernabéu solo pueden jugar los mejores y el holandés lo es, sin ningún tipo de duda. Para muchos, es el mejor central del plantea con diferencia gracias a su salida de balón, su velocidad, su corpulencia, su juego aéreo, su fuerza, su inteligencia… cualidades que le hacen ser el máximo favorito a alzar el ‘The Best’ y el Balón de Oro.
Además, la prensa británica da por hecho que los próximos días firmará una renovación millonaria con los de Anfield. Pasará a ser el mejor pagado del equipo, por delante de Mohamed Salah o Sadio Mané, y uno de los ‘top’ en la Premier League, solo por detrás de Kevin de Bruyne y el ‘Kun’ Agüero.
Sea como sea, hasta que no firme, la opción Van Dijk está abierta para el Madrid.