El Real Madrid fichó a Eden Hazard por 100 millones de euros como su nuevo galáctico después de la salida de Cristiano Ronaldo. El club no se esperaba que el habilidoso belga tuviera un problema del que nadie preguntó previamente. Ahora que el atacante ha compartido unos meses en el club con los preparadores físicos, se ha detectado su mayor inconveniente y tiene que ver con la alimentación.
A Hazard le gusta comer, eso se notó en su presentación y durante sus primeros entrenamientos con el Madrid. El ex Chelsea reveló el caos alimenticio en el que cae cuando se va de vacaciones en unas palabras para Sport/Foot Magazine: «No mentiré. Cogí cinco kilos en verano. Si estoy de vacaciones, estoy de vacaciones. Subí a 80 kilos, pero los perdí en 10 días».
Un atleta de alto rendimiento no puede dar esta clase de ventajas, ya que la competencia cada vez se reduce más y los detalles terminan marcando diferencias determinantes.
Zidane es un admirador de la calidad de Hazard desde que jugaba en el Lille, de hecho, le ha dado libertades que no acostumbra con otros futbolistas, pero el crédito se agota.
El Real Madrid está superando momentos importantes de la temporada con muchos de sus titulares lesionados, pero los momentos definitivos están por llegar y va a ser necesario contar con el Duque. Cuando el ‘7’ blanco está en buenas condiciones, es el jugador más desequilibrante que hay en la plantilla.
Cuando regrese de la lesión, Zidane le exigirá a Hazard como corresponde por su calidad. Llega la hora de demostrar que lo pagado por él no fue exagerado, de momento, tiene que cargar con números preocupantes, 1 gol y 4 asistencias en 13 partidos disputados entre LaLiga y Champions League. Su mayor obstáculo para triunfar en el Real Madrid es la comida.