El guardameta del Real Oviedo Andriy Lunin fue reconocido por la afición como el mejor jugador del mes de enero, el primero que juega como titular después de temporada y media de suplente en Leganés y Valladolid y tras el cual se ve con más confianza para "demostrar lo que vale" en los cinco meses que el portero del Real Madrid tiene por delante en el club ovetense.
"En el primer partido me faltaron minutos, sensaciones y comunicación, pero hemos mejorado ese aspecto. Estos cinco partidos me han ayudado a recuperar sensaciones pero puedo hacer más, puedo ser mejor, y en eso estoy trabajando", señaló.
Según sus palabras, ahora que cuenta con la confianza del cuerpo técnico quiere demostrar lo que vale, "ayudar y seguir creciendo".
El ucraniano, propiedad del Real Madrid, señaló que está en contacto con el club madridista, pero matizó que no sabe qué va a ocurrir con su futuro, por lo que quiere centrarse en mejorar en el Oviedo y lograr el siguiente objetivo que se marca para aportar al equipo azul: la ansiada portería a cero.
"No hablo a diario con el Real Madrid, pero estamos en contacto con el club y el entrenador de porteros. Venir a Oviedo está siendo como esperaba, pero puede ser todo mejor", argumentó.
El portero azul sabe ya de la importancia del Tartiere, donde el conjunto carbayón se impuso hace dos semanas al Albacete empujado por más de 17.000 aficionados en la grada, y espera que ese mismo apoyo se repita este sábado ante un Alcorcón al que deben ganar para meterlo en la lucha por la permanencia.
"Las sensaciones en el Tartiere son espectaculares, porque con el estadio casi lleno la gente aprieta mucho y nos ayuda una barbaridad. Da mucho ánimo y te hace jugar aún mejor, con su ayuda podemos hacer muchas cosas", concluyó el guardameta.
Los carbayones se ejercitaron de miércoles en la primera de las tres sesiones diseñadas a puerta cerrada de la semana, y mañana se trasladarán al Tartiere para preparar sobre el terreno el duelo ante el Alcorcón de LaLiga SmartBank (sábado, 18:15 horas).