Los Reyes Magos han llegado al Real Madrid con una desagradable noticia. Florentino Pérez lo temía y en Chamartín ya lo saben: giro brutal con Gareth Bale y un nuevo problemón para Zinedine Zidane.
Tras un inicio notable defendido por José Mourinho, que incluso mandó algún recado a Zinedine Zidane por no contar con Bale, el galés ha ido cayendo y el ciclo de lesiones que ahora sufre le ha alejado, otra vez, de los terrenos de juego.
Su llegada a Londres invitaba a pensar en una liberación cercana de su ficha y del precio que cuesta tener a Bale en el equipo, pero lejos de cumplirse, tal y como ha informado Deportes Cuatro, en el Tottenham ya han comenzado a pensar en la vuelta del delantero al Real Madrid.
Con contrato de cesión hasta final de temporada, Bale volvería al Santiago Bernabéu el próximo mes de junio con un año más de contrato y con el problemón de encontrarle otra vez un equipo dispuesto a pagar su ficha y su fichaje.
Si el Real Madrid confirma la pésima noticia de su vuelta, comenzará otra vez la busca y captura de un equipo que apueste por un futbolista que, en sus últimas temporadas, ha brillado mucho más por todo lo que ha hecho lejos del campo de fútbol que dentro del mismo.
El galés aún tiene mucho tiempo por delante para convencer a Mourinho de su valía para el Tottenham, pero, al contrario que su compañero Reguilón, su paso por Londres se está llenando de grises y de malas noticias: para él, para el club inglés y para el propio Real Madrid.