El Real Madrid volvió a sufrir un apagón ofensivo en el partido ante el Sheriff que le costó una sonrojante derrota al equipo de Carlo Ancelotti. Después de un inicio espectacular en el tramo goleador, los madridistas suman un gol en los últimos dos partidos con un jugador, Vinícius, como una de las muestras de este bajón a nivel de números y, sobre todo, de sensaciones.
El futbolista brasileño arrancó la temporada con unas cifras espectaculares, sumando cinco goles en los cinco primeros partidos de LaLiga Santander. Con esa 'manita' de dianas, el atacante superó sus registros de las temporadas completas pasadas y hacía presagiar que ya había resuelto sus problemas de cara a puerta.
Su capacidad para el regate seguía intacta aunque la gran novedad era que, esta vez sí, era capaz de materializar en goles sus jugadas. Sin embargo, ante Villarreal y Sheriff, Vinícius ha vuelto a mostrarse errático de cara a portería.
El problema no es que pase dos o tres partidos sin marcar, sino que vuelva a fallar a la hora de elegir dentro del área. En Champions, Ancelotti le pegó a la banda izquierda cuando el equipo se volcó pero no siempre acertó a la hora de elegir entre disparar ni al poner el balón para el remate de un compañero.
Eso sí, gracias a él el Real Madrid pudo marcar su único gol de partido. Un regate suyo acabó en derribo y penalti a favor del equipo blanco, con Karim Benzema transformando la pena máxima. Su actuación no fue mala, pero aún debe seguir puliendo esa toma de decisiones final que tantas críticas le ha costado durante los últimos años.