No pudo entrar peor el Real Madrid al trascendental partido que midió a los de Ancelotti ante el Sevilla FC en el Ramón Sánchez-Pizjuán. El equipo merengue tardó mucho en encontrarse algo cómodo sobre el césped y cuando lo hizo ya perdía por 2-0 tras los goles de Ivan Rakitic y Erik Lamela. En ambos tantos quedó retratado uno de los pilares defensivos del equipo blanco.
Y es que los primeros 25 minutos de Eder Militao fueron desastrosos. En el primer gol, obra de Rakitic, el brasileño formaba parte de la barrera de los de Ancelotti y se salió de su posición posibilitando que la pelota superara la barrera y se alejara del alcance de un Thibaut Courtois que no vio salir la pelota.
En la segunda acción definitiva, Tecatito Corona lo supera con facilidad y además Militao está cerca de cometer penalti por ir al corte.
No estuvieron afinados varios de los once futbolistas que comenzaron el duelo de este domingo ante el Sevilla, pero lo cierto es que Ancelotti es consciente de que Militao no estuvo nada bien durante los primeros 45 minutos.
No optó por sustituirlo (apenas había soluciones defensivas en el banquillo), pero el sacrificado sí fue Eduardo Camavinga, que se jugó la expulsión en un primer tiempo aciago para los de Ancelotti.