El Real Madrid de los milagros lo ha vuelto a hacer. Como si de un 'más difícil todavía' se tratase, el equipo de Ancelotti ha vuelto a levantarse cuando todos les daban por muerto para meterse en una nueva final de UEFA Champions League en busca del 14º título.
¿Quién pensaba que este equipo se iría de París sólo con un 1-0 abajo? ¿Quién predijo que iban a remontar en la vuelta cuando Mbappé casi mete tres goles jugando solo? ¿Quién se imaginó la exhibición de Stamford Bridge? ¿Quién tenía en la mente ese pase con el exterior de Modric a Rodrygo en la vuelta contra el Chelsea que inició todo? ¿Quién logra meterse en la cabeza que el Manchester City sólo se llevara ventaja de un gol en la ida? ¿Y quién, por favor, puede explicar lo que ha pasado este miércoles?
Lo del Real Madrid no tiene sentido. Llámenlo suerte, fe, magia, milagro o lo que a cada uno le sea más fácil con respecto a su filosofía de vida.
Porque buenos son, es innegable. Karim Benzema puede ser fácilmente el mejor futbolista del mundo y Courtois el mejor portero. Modric es una leyenda de este deporte, Vinícius promete serlo y Rodrygo está tocado con una varita. Sin desmerecer al resto porque todos han colaborado en esta nueva gesta.
Ahora toca el Liverpool, en París, en una reedición de las finales de 1981 (que ganaron los ingleses) y la de 2018 (con victoria blanca). Tras PSG, Chelsea y Manchester City... cualquiera se atreve a dar un pronóstico a un equipo que tiene un adjetivo que define todo: campeón.
🔢 El 1x1 de una noche de locura en el Real Madrid: Courtois, Camavinga, Nacho y Rodrygo, de sobresaliente https://t.co/a5l2QG3rj0
— ElDesmarque Real Madrid (@DMQRealMadrid) May 4, 2022